domingo, 22 de mayo de 2016

BUSCANDO EL SILENCIO


       Meditamos en silencio, para encontrar el Sonido de la Vida.
       Tratamos de silenciarnos, para poder escuchar a quienes nos rodean.
       Buscando la virtud en el silencio, tratamos de apagar los sonidos, los ruidos, que lo rompen.
       Silencio es la voz de la Vida: en el trueno, en el murmullo de los manantiales, en el susurro del viento, en los gritos estruendosos del que nace o del que sufre, en la voz que amorosa nos susurra al oído, o los gritos de odio de quien no puede aceptar vivir.
       Buscamos el Silencio en la ausencia del ruido, pero Él está en el que escucha mientras habla, porque Silencio, lo que se dice Silencio, es: La Seidad de la Voz de la Vida. Para ser Silencio, hay que Ser el Sonido, la Voz de la Vida que solamente puede expresarse en Silencio.


No hay comentarios:

Publicar un comentario