miércoles, 9 de marzo de 2022

LEER, ENTENDER Y SER

        Estamos inundados de escritos y frases de grandes personas, de sabios, de eruditos, de filósofos, de políticos de guerreros y generales, que usamos al igual que los refranes, creyendo y estando seguros, que su significado es el que nos han explicado o hemos entendido.

       Los usamos considerando que hemos llegado al nivel de inteligencia y conocimiento de aquél que lo pronunció por primera vez.

       De mi Maestro sólo pude aprender y recordar, frases y palabras sueltas, que nunca me dio explicaciones de por qué las había usado, el cómo influían en sus explicaciones, o cómo debería de entenderlas.

       El que no me diese explicaciones, no es el motivo de por qué digo o escribo que nunca me enseñó.

       El que nunca me enseñase, es por mi profundo respeto hacia Él, a quien no puedo culpar o cargar con mi entendimiento o mal uso de sus frases o palabras.

       Soy el único responsable de las interpretaciones o uso erróneo de sus palabras y frases, soy el único responsable de lo que entendí de las traducciones que de sus palabras me tuvieron que hacer.

       Soy el único responsable de usar unas palabras y unas frases, que fueron usadas por Él en un contexto, que no es en el que yo las uso, porque su significado es el que yo entiendo, no el que mi Maestro usó.

       Y es que el publicar palabras o frases famosas, el repetir frases de alguien que nos gusta lo que escribe, no deja de ser la publicación de lo que nosotros hemos entendido.

       Suelo comentar casi todas las frases de Maestros, famosos, filósofos, sabios y gente importante que leo en algunas publicaciones. A veces parece que las contradigo, que no estoy de acuerdo con ellas.

       La mayoría de las veces, trato de darles contraste, de resaltarlas, con sus aspectos contrarios, otras pienso de otra forma, otras simplemente trato de aclarar los errores de entendimiento que pienso puede haber en una lectura rápida, porque damos por sabido el significado.

       La Gran Duda, significa también que debemos leer cualquier escrito, como propio, aceptando la responsabilidad de nuestro entendimiento. Significa que cada palabra, cada letra de ella, es la Vida Absoluta, en su Esencia, por lo que su Entendimiento Absoluto, nos llevaría a comprender la Vida que somos, pues en ese Todo Ser Uno, se encierra ese entendimiento.



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