domingo, 22 de enero de 2023

NUESTRO FRUTO

           Lo más natural para ver el fruto de algo, es mirar en la planta, mirar su familia, mirar su convivencia y relación con el entorno.

          De igual manera que hay que presuponer que un manzano, nos dará manzanas de la variedad del árbol, o de las variedades injertadas. La Humanidad, se presupone que dará seres humanos como fruto, y los seres humanos, semillas que darán como fruto: Una sociedad humana, conviviendo humanamente.

          Nuestra Naturaleza de Humanidad, nos llevó a desear una sociedad y una convivencia humana, extensible a nuestro amor por el Universo y cuanto existe en Él.

          Para ellos, creamos filosofías y religiones que nos llevasen a entender y practicar los principios y valores necesarios, para manifestarnos como el fruto de la Humanidad, alimentando el Amor y la Dignidad en la manifestación de la Vida.

          Nuestro desvío de la dirección correcta, nos llevó a crear filosofías que justificaran nuestros fracasos y explicaran nuestros errores o los justificasen. Y religiones que cargaran con nuestra culpa, haciendo responsable al Dios al que venerábamos y decíamos servir, vendiéndole con un beso y un abrazo, a cambio de nuestra inocencia, como cortina a nuestra culpabilidad.

          No pudiendo evadirnos del Yin y del Yang, no hemos dejado de crear ayudas, para todas las víctimas de nuestra ambición, de nuestra avaricia, de acumular todo aquello que no podremos llevarnos, dejando riquezas materiales, a una sociedad cobarde, corrupta y que trata de solucionar los problemas que creamos, como modo de silenciar, nuestro fracaso y podredumbre como fruto de la Humanidad.

          Niños, abusados y violados, educados en la servidumbre y la ambición, fruto del egoísmo.

          Jóvenes, a los que se les dan unas metas de logros personales, en los que no hay principios o valores humanos. Educados para servir al Poder, poderosos, ambiciosos y violadores de la humanidad, a conseguir enriquecerse y abusar de su poder.

          Adultos, que deben integrarse en un rebaño, no importa en principio en cuál, siempre que se sirva al Poder, o se luche contra lo establecido, que permita la aplicación de Leyes y castigos, que protejan y den impunidad al abuso de Poder.

          Una vejez, que perdida su humanidad, busca disfrutar de lo que no ha podido a lo largo de su existencia, en un rebaño, al que se le sirve el pasto necesario, para que callen y sigan sin pensar y sin recordar su Naturaleza Humana.

          A diario, siendo que desconocemos la mayoría de los abusos y violaciones de todo tipo, que estamos cometiendo cada instante, las noticias nos recuerdan, que hay: Guerras, abusos, violaciones, asesinatos, delincuencia, bandas criminales, comercio de personas, de drogas que silencien la conciencia de las personas y sin que se den en las noticias los abusos y violaciones que son amparados por las Leyes y su tergiversación si es necesaria o alguien las denuncia.

          Ha habido desde principios de año, muchas noticias de abusos y violaciones de mujeres, de asesinatos de violencia machista, de violencia feminista, de asesinatos, abusos, violencia y bullying escolar cometidos por niños, y bullying laboral. Sin contar las explotaciones de personas, niños y adultos, la delincuencia, la expulsión de sus hogares de familias, de tribus y culturas, en nombre del progreso o de que proteger al delincuente, solucionará la necesidad de delinquir. La realidad es que se expulsa de la sociedad a los que no se atreven a abusar y violar, que impide que el Poder, promulgue nuevas leyes y castigos. Que, por miedo, busquemos la protección del Poder, vendiendo nuestra alma.

          Los frutos que más beneficios producen en nuestra sociedad, son la Cobardía y la Indignidad. Cuya semilla produce el medio donde se sumerge: Carencia de Humanidad.

          La humanidad no reside en parchear o crear organizaciones que ayuden a los parias que creamos, sino el evitar que nazcan. Porque Humanidad, es un fruto sin semillas, que produce sólo seres humanos.



No hay comentarios:

Publicar un comentario