Consideramos que la
realidad es el mundo espiritual, de regreso a Dios.
Que cuanto vivimos
aquí en esta dualidad, es simplemente una “matrix”, o mundo ilusorio y ficticio
en el que a pesar de creer que existe, es sólo una producción de nuestra mente
o del sueño.
La Realidad es que no
hay mundos separados, diferentes, reales o irreales.
Todos participan de la
misma Existencia, dependiendo desde la ventana, a la cual nos asomamos, de la
ventana desde la que vemos el vivir o la Vida.
No importa el mundo en
el que deseemos vivir, en todos ellos hay que alimentarse correctamente,
incluso siendo Uno, su funcionamiento dependerá del funcionamiento de las
partes.
Creemos que en el Uno
deja de existir la dualidad, pero es donde nace. Sin ella no habría Uno, ni tan
siquiera Absoluto o Todo.
Cuidemos desde dónde
miramos, porque es el mundo real para nosotros, no importa que pensemos,
vislumbremos o creamos en esos otros Universos. Es desde lo que hacemos en este
real, desde donde daremos realidad a los que soñamos.
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