En los lugares o tribus, que el
gobierno se realizaba con un modo de relacionarse y gobernar, vemos que los
gobernantes siguen haciéndolo, de la misma forma, con los cambios sociales
lógicos.
Muchos países, desterraron la
monarquía, por medio de revoluciones. Los gobiernos recibieron otros nombres,
pero la corrupción y el modo de relacionarse con el pueblo, sólo es diferente
por el tiempo y no por los cambios en nosotros.
España, una de las naciones que no
tuvieron la revolución, en la época cuando se liberaron las colonias, se
organizaron revoluciones, y creímos cambiar el mundo, se conformó con perder
las colonias.
La historia, nos recuerda muchos
momentos en los que luchamos por liberarnos, pero también una forma de ser
gobernados y cómo vivimos ese vasallaje.
Lo nuestro ha sido la picaresca, el
sonreír ante los abusos y violaciones y reaccionar cuando no nos ven, o
alinearnos con el poderoso.
Para
no retroceder mucho, podemos mirar a Viriato, y sus amigos traicionándole por
unas monedas, al estilo Judas.
La
traición de los reyes, vendiéndonos a los franceses, donde reaccionamos con
orgullo, pero no desde la razón y la Dignidad.
Los
fracasos de las repúblicas, que al igual que en toda nuestra historia, hemos
tratado de erradicar a la otra mitad, sin ser capaces de convivir y esforzarnos
por vivir con Dignidad. No la dignidad del orgullo, sino esa Dignidad que lleva
a defender, proteger y vivir en la Verdad y la Justicia.
Algo
que sólo el loco de D. Quijote se atrevió, con un Sancho temeroso, que esperaba
que le diesen Dignidad y riqueza de respeto.
Hoy
tenemos a alguien sin principios, sin valores, sin Dignidad, incapaz de saber
que existe la Verdad y la Justicia, que sólo vive para alcanzar sus ambiciones
de poder y usar al pueblo para ello.
La
verdad es, que no culpo a Sánchez de la Indecencia e Indignidad con la que
inunda España. Culpo a ese pueblo cobarde y sin Dignidad, que le vota, que le
sigue sin saber dónde y que calla o no hace nada.
Culpo
al Poder Judicial, que no tiene el amor necesario por la Verdad y la Justicia,
para revelarse y no permitir la Prostitución de la Justicia, la Verdad y la
Dignidad, violando la Ley y convirtiendo en prostíbulo la Constitución y sus
Jueces.
Vender
España por un plato de poder, a quienes nunca han sido independientes, al ser
las únicas comunidades españolas que nunca han tenido rey propio. Siendo que una
ha estado dependiendo de reyes de otras zonas y la otra fueron tribus hasta la
edad media, sin tener realmente un rey o formar un reino.
Obviamente
en un tiempo en el que se crea la ONU, Europa, la asociación de países en Asia,
América y África, y Rusia trata de recobrar la Unión de Repúblicas rusas,
obligando a otros países a que le sirvan.
Cataluña
y la Comunidad Vasca, deciden ser independientes, pero mantenidos por Europa y
España, algo que sólo los hijos desagradecidos y vagos, tratan de obtener.
Obviamente,
tener un hijo así es que alguien le ha maleado, los padres o algunos amigos.
Todos
los altos hornos llevados a una zona, las hilaturas de España, llevadas a otra,
fue cosa de los padres. Bajar los pantalones y subir las faldas de los españoles,
por conseguir el poder, amparado por palmeros y beneficiarios de los abusos y
violaciones, de la Ley, la Justicia y la Constitución, es simplemente el paso
de la cobardía de un pueblo, que abusa, viola o calla, todo ello fruto de la
Indignidad.
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