No pretendo molestaros

Al parecer, algunas personas se sienten ofendidas porque no las agrego a mi foro. No tengo, ni pertenezco a ninguno, simplemente escribo y lo publico en abierto, para que libremente pueda ser leído o comentado por las personas que lo deseen. Suelo comentar las páginas que me lo permiten y les parezca bien, de las personas que me añaden a su foro. Suele ser lo que siento al ver lo que han publicado, intentando dar una visión diferente, desde la que ha sido escrito. Lo que os agradezco.

Si tenéis que pagar para entrar en la página, no es la original. Como digo a la derecha es Gratuita y sin publicidad.
Yui Shin

lunes, 31 de agosto de 2020

SIN EXPECTATIVAS

 

Esperar desespera, incluso hasta perder la esperanza.

Escuchar asevera, incluso hasta no saber lo que nos dicen.

Saber qué esperamos o deseamos, escuchar para confirmar lo que conocemos o sabemos, es la puerta cerrada por donde no entra nada.

Escuchar para asimilar aquello que necesitamos, es escuchar. No recogiendo aquello innecesario para nosotros.

Escuchar para confirmar lo que pensamos, es oír aquello que tenemos en mente y no lo que nos quieren decir.

Esperar lo que deseamos, impide percibir todo aquello que nos es ofrecido y en la desesperación de la espera, no ver cuando nos dan lo deseado.

Es por ello por lo que nos recuerdan, que hay que vivir con amor, con la mano abierta, con aceptación. Es lo que origina la Gratitud de celebrar lo que nos es ofrecido o dado, sin que aparezca, ni tan siquiera la semilla de la discriminación.



domingo, 30 de agosto de 2020

EL MAESTRO

 

          Leemos frecuentemente que somos nuestros propios Maestros, que hay que escuchar a nuestro Maestro Interior, que hay que encontrar un Maestro que nos indique el Camino.

          Es difícil imaginar y comprender, la carga que le queremos obligar a llevar a alguien.

          Es casi imposible de imaginar, la carga que tiene que llevar el Maestro, al renunciar el discípulo a llevar su responsabilidad y pedir a la Vida, que un Maestro le sea concedido para llevar y ser responsable de su vida.

          Ser nuestro Maestro, conlleva:

          Cuando somos nuestros propios Maestros, nos hacemos responsables por tanto de acoger como discípulos a todo cuanto existe o no y aprender de ellos.

          Acoger como discípulos, implica no sólo hacernos responsables de lo que aprendemos, sino de lo que hacen.

          Es por ello que la Gran Maestra es la propia Vida.

          Siendo el Gran Maestro Dios, que ni tan siquiera tiene discípulos, por ser Él mismo Discípulo y Maestro.



NADA

 



¿Cómo podríamos ir y venir si todo es Uno?

¿Quién puede o podría acompañar o conocer al Uno?

Cuando un vacío es llenado, lo acogido en ese Vacío, es más pequeño que el Vacío que lo acoge.

En un Vacío Infinito, Todo es acogido como Absoluto.

Si lo acogido en el Vacío fuese algo, ¿Cómo podría cambiar, transformándose al acoger a su creación?

Sólo quien mira desde fuera, puede ver Uno o sus mitades.

Sólo quien mira desde fuera puede Iluminarse con la Luz del Vacío, del Absoluto.



sábado, 29 de agosto de 2020

AMANECIENDO

 


          Hay tanta desesperación en contemplar que todo aquello que tenemos, que deseamos, que nos rodea, va desapareciendo continuamente sin descanso.

          Vemos cómo vamos quedándonos solos, porque cuanto nos acompaña y hace que sintamos bienestar desaparece, hasta que un día perdemos al único que no nos ha abandonado en nuestra vida terrenal: nuestro cuerpo, dejando abandonado no sólo a nosotros, sino a cuantos cuentan con nosotros, que son privados de nuestra presencia.

          Si miramos a nuestro alrededor, quizás con mirada que permita ver en la lejanía y la profundidad, podríamos ver cómo nada se va, cómo nada se aleja de nuestras vidas, si no es, para que encontremos al único que no podemos encontrar, a ese yo que somos, a ese ser que es nosotros mismos.

          Cada amanecer, el Sol ilumina nuestro despertar, consigue que la luz penetre en nuestras vidas. Nos gustaría que nuestro vivir estuviese iluminado. Pero el Sol sabe que no estamos solos, que al otro lado, en otro mundo, hay quienes viven en la oscuridad sin su presencia.

          Así que viaja errante por el cielo, tratando de recordarnos, que no podemos ver nuestra luz en su presencia, que no es Él quien tiene que iluminar nuestra vida.

          La Luna, nos recuerda que el Sol no se ha ido, que está iluminando a los demás, para que en la esperanza de todos, siga viva la llama de la luz propia. Ella solamente refleja la luz del Sol, sabe que no puede haber luz, sin la existencia de la oscuridad, que permite iluminar a la luz y que puede reflejarla en su oscuridad, para que veamos y recordemos que la oscuridad es lo que tenemos que iluminar, que puede ser iluminada y llevar la luz que emitimos a otros mundos, a otras personas y vidas.

          Nos enseña, que cuando están cerca, la Luna desaparece, pues la luz del Sol impide que su oscuridad pueda ser vista, al estar iluminada. Pero que la otra mitad, sólo queda iluminada por estrellas lejanas, algunas de las cuales no tienen existencia en la dualidad.

          Nuestras vidas pueden estar iluminadas, por leyes, por creencias, por conocimientos, por ese Sol que nunca nos abandona, por muy extremas que sean las circunstancias, regresando incluso cuando todo está cubierto con nubes negras.

          Pero seremos reflejo de la Luz, un simple espejo, que refleja la luz que hay en su vida. Luz a la que no le da vida, al no ser luz propia, sino, la que ilumina nuestra oscuridad.

          El Sol y la Luna, regresan cada día, cada noche, más mayores, diferentes, pero siempre trayendo la luz que han dado y reflejado desde el principio de los tiempos, desde antes de que naciese el tiempo.

          Nada desaparece, nada se va, porque en cada amanecer, la luz que lo ilumina es la que ha evolucionado y asimilado todas las oscuridades que ha iluminado.

          Cada día que nos levantamos, en nosotros están todos cuantos hemos sido en los infinitos ahora, y lo que hemos vivido, aprendido y asimilado de cuantos han existido a nuestro alrededor en todos los amaneceres que hemos vivido.

          Somos el producto final de innumerables vidas y amaneceres, que nos recuerdan que la Luz tiene que estar en nosotros si queremos ser Amanecer.



viernes, 28 de agosto de 2020

SOY

 


Así es si así te parece.

Lo que algo dice, es siempre lo que entendemos.

Nuestra vida será positiva, si vemos la positividad de lo que vivimos.

En cambio, nada deja de ser exactamente lo que es.

No importan los cambios o que algo sea destruido, hay algo que es permanente eternamente y es: Que, a pesar de sus condiciones y circunstancias, nada deja de ser exactamente lo que es.

Cuando somos jóvenes, somos jóvenes. Lo misterioso es que cuando envejecemos, seguimos siendo lo que somos, igual que cuando éramos jóvenes.

Aceptar las cosas en lo que son, no nos impide verlas como deseamos.

Ver la positividad de las condiciones y circunstancias, simplemente nos hace ignorar la mitad de la Vida.

Porque sin importar cómo las veamos, pensemos o deseemos, podemos cambiarlas, sin poder evitar que sean lo que son.

Lo que somos, es la creación de lo que hemos sido.

Lo que somos es el creador de lo que seremos.

Sin poder evitar a lo largo de la Eternidad, que siempre seremos lo que somos.



miércoles, 26 de agosto de 2020

MI AMIGO DIOS

 


          Se ha perdido en el tiempo, esa sensación de miedo, de soledad, de desesperación, de estar perdido, de estar fuera del hogar, incluso lejos de casa.

          Hace tanto tiempo que me encontré en un lugar desconocido, rodeado de animales más fuertes y rápidos que yo. Con inclemencias de un Sol que me quemaba, de lluvias torrenciales, de volcanes intentando quemarme, sin un lugar donde guarecerme. Rodeado de plantas desconocidas, muchas venenosas y que no servirían para alimentarme.

          Ríos que me impedían huir a la otra orilla de los peligros que encontraba en esta. Océanos que me amenazaban con sus olas y la profundidad de sus aguas. Montañas que me dolía el cuello y el alma, de mirar cómo llegar a otro valle que pudiese ser más seguro para mi vida.

          Un día encontré a mi amigo invisible, a alguien que me hacía compañía, que me protegía y aconsejaba. Fue la terminación de mi soledad, de mis miedos paralizantes.

          Encontré el agua del río y de los manantiales que me calmaban la sed, las plantas que me saciaban el hambre, animales que me ayudaban y protegían, las cuevas en la montaña que me ofrecían un hogar, las montañas que impedían que se acercasen los enemigos.

          Por primera vez, sentí que podía llegar a conocer el lugar donde me encontraba, acompañado de mi amigo invisible, a quien le contaba todas mis dudas y me ayudaba a resolverlas. Al que le pedía ayuda para encontrar aquello que necesitaba. Su ayuda y consejos, me dieron la seguridad de poder seguir viviendo, existiendo y formando parte de este lugar desconocido y aterrador.

          Fui creciendo y me pareció que tener un amigo invisible, no sería entendido por aquellos que había encontrado y que llevaban más tiempo viviendo en este lugar.

          Les hablaba de él, y ellos me miraban extrañados, a pesar de que sentían envidia de que tuviese un amigo que me ayudaba tanto y que nunca me había abandonado.

          Al final me dijeron que por qué no le dábamos un nombre, para no llamarle: “Amigo Invisible” y poder hablar de Él con naturalidad y como si fuese un amigo que podríamos compartir.

          Nos reunimos en muchas ocasiones, tratando de encontrar un nombre que fuese digno de un amigo que nunca te abandona, que siendo invisible siempre puedes encontrarlo en ti, dándote esa sensación de compañía y protección, que permite vencer los miedos, finalmente decidimos casi por unanimidad llamarle Dios.

          No me importó compartir a mi amigo con los demás, pues un amigo se agranda al ser compartido.

          El tiempo siguió pasando, muchos dijeron que era su amigo invisible, que siempre fue suyo, dándole nuevos nombres.

          Nacieron las peleas, las luchas, las guerras, por poseer al amigo invisible que más te daba, que más te ayudaba.

          Yo miro a todos ellos, me acuerdo de mi amigo invisible, ese que me ayudó a vencer mis miedos a poblar este lugar. Ese que no le importaba ser compartido, de ser amigo de cualquiera, al que para que le conocieran los demás le llamamos Dios.

          Pero la amistad se perdió hace mucho, mucho tiempo, ahora es el Dios invisible, al que le exigimos que nos dé lo que pedimos, que nos quite los miedos para conquistar a los demás, que nos dé valor para conquistar cuanto es conocido.

          Y es que cuando le damos forma y nombre al amigo invisible, hemos olvidado, que en el amigo invisible quien es imprescindible para que exista, soy yo.



EL ALMA

 


          Nos hemos acostumbrado tanto a ver el alma de la religión y la filosofía, que hemos olvidado que la Vida no crea desperdicios, que nunca sobra nada de cuanto hay o ha habido.

          Nada sería lo que es y como es, si algo hubiese sido diferente.

          El Alma, incluso con mayúscula, no es algo que existe fuera de la Ley.

          El Alma, no puede desprenderse de ropajes, de cuerpos o de algo que le es innecesario.

          El Alma es lo que Es, porque tiene ese cuerpo. Ese cuerpo es lo que le ha permitido evolucionar, por lo que manifiesta el cuerpo con apariencia diferente, por ser el cuerpo transmutado del que siempre ha tenido, el cuerpo físico que permite la evolución del Alma. El cuerpo físico que la permite manifestarse en la forma.

          El árbol está en la semilla, está en la leña, está en la viga o el mueble, pero ha adaptado su forma, dependiendo de su evolución, de la evolución de su alma de árbol.

          Aparentemente el cuerpo es diferente, ha cambiado, pero obviamente es el cuerpo adaptado al grado de evolución del alma del árbol, sin la que no habría alma de la viga o del mueble y que ya existía en la semilla.



martes, 25 de agosto de 2020

EL TODO Y LAS PARTES


          Es curioso que las individualidades son todas independientes.

          Un ojo y una mano, son individualidades independientes. Una mano puede ser cortada sin que el ojo sea afectado.

          Un ojo ciego, hace que la mano sea más sensible, si alguien quiere ver con un ojo ciego.

          Pero son individualidades independientes, como lo es cualquier parte de nuestro cuerpo o cualquier individualidad integrada en otra.

          Los átomos de una Galaxia, de un Universo son diferentes e independientes como individualidad.

          Pero no existiría un Universo sin átomos, tampoco átomos sin Universo.

          A veces cuando tratamos de saber nuestra Realidad, nuestro Ser o Somos, miramos nuestros cuerpos y pensamos y analizamos como diferentes, como individualidades independientes que lo son, pero la mayoría de las veces nos confundimos al pensar o creer que existe una separación real, que no son las partes o individualidades que sólo pueden existir en ese Todo, en el que están integrados.

          No importa que las individualidades que integran el Todo cambien, que desaparezcan unas, incluso todas, porque lo único que no cambia es el Todo, es lo único que permanece inmutable y sin cambio, por mucho que cambien las individualidades o incluso desaparezcan.

          El cuerpo no puede existir sin alma, sin espíritu.

          Pero no habría espíritu, sin el cuerpo o sin el alma, al no tener donde manifestarse, no tendría Consciencia de existencia, sólo la de ser, que al ser la No-Percepción de Sí Mismo, solamente sería como Vacío o Inexistencia.

          Vivir sólo es posible para las manifestaciones de cualquier nivel, pero es algo imposible para la Vida.

          De la misma manera, la espiritualidad es posible solamente para cualquier cuerpo, incluso para las partes que integren el cuerpo espiritual, pero es imposible para el Espíritu.

          Podríamos decir que el agua moja, pero obviamente no puede mojar al agua.


domingo, 23 de agosto de 2020

MIRAR Y VER

 

          A veces me pregunto, cuando leo, cuando escucho, cuando veo las frases que quieren guiarnos hacia la Humanidad.

          Si todo cuanto encontramos en la Sabiduría que durante milenios nos han dejado, cuantos Maestros han venido.

          Es que: Trascender, la Iluminación, el Nirvana, la Santidad, la Unión con el Todo o la Deidad, es simplemente la implementación o mejora de la Dualidad.

          Porque pocas veces miramos más allá del observador, del yo que contempla la disolución de un ego inexistente o que encuentra que si cambian los demás, la Humanidad ha sido alcanzada.

          Cuando hace miles de años, Lao Tse, dice que: El Tao que puede conocerse, percibirse, darle nombre o ser nombrado, no es el Tao Verdadero, el Tao Sin Nombre, el Absoluto, deberíamos preguntarnos si aparte de haberlo leído y escuchado, lo hemos leído y escuchado.


sábado, 15 de agosto de 2020

MI CUERPO


Sentado a la sombra

Viendo mi cuerpo jugar,

Sus esfuerzos por complacerme,

Su manifestar lo que soy,

Siempre fiel amigo.

Admirando, cómo en su enfermedad

Hacía aquello que yo deseaba,

Sin pensar en sí mismo,

En la enfermedad o la salud,

Manifestándome en la dualidad.

Viéndole tan fiel,

Me pregunto, qué será de él,

Cuando yo vaya a otros mundos,

Otras vidas,

A las que no podré llevarle.

Aun sabiendo que:

Vivirá eternamente

En mi corazón,

Una lágrima riega la Tierra.

miércoles, 12 de agosto de 2020

SER MEDITACIÓN

 

          Podríamos vivir como espectadores, toda nuestra vida. Vivir en una aceptación total de cuanto está sucediendo, sin intervenir, sin juzgar, sin discriminar.

          Pero los dioses de todas las mitologías, esos que nos crearon y nos observan desde su Olimpo, desde su cielo, no pudieron quedarse como espectadores, interviniendo en nuestras vidas y dando origen a los semidioses.

          Pero todo el Universo nos contempla, es el mero espectador de lo que le rodea, dentro y fuera de Él.

          Nos contemplan las estrellas, las constelaciones, las flores, el Sol y la Luna, los mares y las profundidades que ven las montañas mucho más altas. Nos contemplan los insectos, los átomos, las células.

          Toda individualidad, es mera espectadora de cuanto acaece y sucede a cuanto hay a su alrededor.

          Nosotros meditamos, tratando de ser esos mismos espectadores, que aceptan las decisiones de la Vida, que observa sin discriminar y sin juzgar, cuanto se manifiesta a su alrededor.

          Le llamamos el no-hacer, ser el mero observador, que es consciente pero no tiene un ego que perciba esa consciencia.

          La diferencia con las individualidades del Universo, es que cada una es lo que es, constantemente, en cada ahora, siendo la manifestación de su Seidad, lo que es llamado “No-hacer”. Lo que significa que hay una actividad constante, activa o en reposo.

          El Universo y sus individualidades son espectadores del Sí Mismo.

          Nosotros meditamos, para alcanzar el desapego, para encontrar el no-hacer, derivado de la desaparición del ego.

          El resto del Universo, ejerce la responsabilidad de Ser lo que son, manifestando en cada ahora su Yo Soy, siendo lo que son.

          Nosotros mantenemos el yo que medita, que observa, que es consciente de estar despegándose, de estar alcanzando nuevos estados y quizás llegue a un estado de olvido de sí mismo, olvidado el yo, que indudablemente tendrá que cocinar y cubrir sus necesidades al regresar.

          El conflicto está, en que no manifestamos lo que decimos ser, que no se trata de ser un observador pasivo, el fin de la Meditación.

          Uno de los objetivos de la Meditación, es el manifestar correctamente lo que somos en nuestra realidad. Es algo que no dejamos de hacer incluso sin haber meditado nunca, la Clave está en: “Correctamente”.

          Porque ser merecedores del nombre que nos damos, es para lo que se medita. Y es necesario manifestar constantemente el nombre que recibimos.

          Pensamos que la Humanidad, está formada sólo por las personas. Es quizás una equivocación, al menos para mí, la humanidad de la gente o personas, es merecedora de ser escrita con minúscula.

          Cuando hablamos de Humanidad, es el Multiverso siendo Uno.


martes, 11 de agosto de 2020

EL CAMBIO


Es natural, que pensemos que podríamos haber hecho más o mejor lo que hicimos.

Es natural, que pensemos que deberíamos estar insatisfechos con nosotros.

Pero en la Vida,

Nadie puede hacer más de lo que hizo.

Nadie puedo hacerlo mejor de lo que lo hizo.

Lo que estamos haciendo, es el resultado de todos esos momentos, decisiones, hechos y omisión de actuar.

Es ahora cuando sin poder hacerlo mejor o más de lo que estamos haciendo, utilizar lo aprendido para los futuros ahora.

La satisfacción, la insatisfacción de lo que somos y hacemos, no servirá para lo que somos, porque lo que somos siempre estará terminado ahora.

Algo que impide que pueda ser cambiado, en ninguno de sus ahora, especialmente sus creadores.

Todo es Impermanente, menos el Ahora que permanece eternamente Inmutable.


lunes, 10 de agosto de 2020

INMERSO EN LA IMPERMANENCIA

 

Dicen que todo es impermanente,

Que todo está en eterno cambio.

Me pregunto cómo es posible,

Que yo haya sido siempre yo,

Sin que existiese cambio.

Antes de la existencia del tiempo,

Era yo,

Durante el tiempo que dura la eternidad.

He sido yo en cada ahora.

Como puedo cambiar,

Si durante toda la Eternidad,

Siempre he sido yo.


domingo, 9 de agosto de 2020

JAQUE AL REY

           Dos inútiles, por sus creencias o siguiendo las órdenes de algún poder, sus palmeros y medios de comunicación a su servicio, han conseguido lo que comenzó con añoranzas de una República, que consiguió el poder apenas sin violencia y que quiso destruir todo lo que no estaba de acuerdo con sus ideas, para establecer una sociedad nueva, que creyese en sus principios y valores, desterrando los que tenían, por obligación, persecución o muerte.

          El resultado es conocido, una dictadura, obligada a restañar los odios, las heridas de una lucha fratricida y la ruina que deja una guerra civil, y la entrega del oro y reservas españolas a sus amos soviéticos.

          Muchas venganzas, muchos abusos en recuerdo de lo que les habían hecho o por ambición de apoderarse de lo que otros tenían. Odios ideológicos, odios ancestrales de familias confrontadas, miseria y hambre en la mayoría, y sobre todo la desilusión y desconfianza en los valores morales y humanos, que ayudaron a cometer muchos errores, si es que el poder necesita escusa o motivos para cometerlos y abusar de los ciudadanos.

          Muchos de estos hechos olvidados, muchas familias que habían superado antiguas rencillas, muerta la cara visible de la dictadura, que con todos sus errores había llevado a España a tener trabajo, industria propia: Iberia, CASA, Bazan, Barreiros, Pegaso, SEAT, y aunque fuese porque no se recibió ayuda de otros países, fundiciones, altos hornos y una agricultura que nos daba de comer.

          No fue fácil, ni exenta de problemas, pero poco a poco, los españoles nacidos tras la guerra, sólo nos quedaban los recuerdos de las historias, para odiar o aceptar vivir en una dictadura encabezada por Franco.

          Por primera vez, los españoles casi conseguimos olvidar nuestras envidias, rencores, odios, prepotencia individual y ese orgullo que nos lleva a no respetar a los demás, porque somos cada yo, los únicos que hacemos lo correcto.

          Un inútil que no supo qué hacer ante una crisis, a pesar de recibir una economía casi sin deudas, añoraba la República y que uno de sus abuelos había perdido en la guerra y que ignoraba que las guerras producen barbarie, antes, durante y después, en los que aceptan matar a sus semejantes, ambas partes iguales. Decidido a reestablecer la continuidad de la República, desde donde había sido derrotada, buscando la venganza, estableció: La Ley de Memoria Histórica, que significa, que nombraría a los historiadores que escribieran lo que fuese conveniente para conseguir los fines buscados con dicha Ley.

          Ya se comenzó a desprestigiar la monarquía, pero ha hecho falta el paso del tiempo, la maduración de la información interesada, las mentiras y medias verdades, que han calado en la sociedad manejadas por los medios de comunicación afines y la llegada del heredero de un Inútil, que podríamos llamar Inútil II, para que ambas mezquindades lleguen a realizarse.

          Franco que con errores y aciertos, consiguió que no nos peleásemos durante cuarenta años, que sacó a España de la ruina, que mató a unos y creó la posibilidad de que otros pudiesen vivir. Que no hizo nada diferente de lo que hace cualquier poder: Tratar de eliminar la competencia, con la disculpa en los medios usados de una guerra fratricida, los odios almacenados y la ruina recibida.

          Excusas que no tiene la República, ni el odio conservado por los que quieren que retrocedamos a esos tiempos en los que el odio y la envidia entre españoles era el pan de cada día.

          Que una persona reciba comisiones por lo que hace, puede ser legal o ilegal. Que alguien del poder, se escandalice porque alguien las reciba, sobre todo ilegalmente, me parece vergonzoso.

          No digo que el rey actuase bien, pero probablemente, si no hubiese aceptado las comisiones, no habría traído tantos negocios a España, pues los demás habrían desconfiado y temerían que denunciase las comisiones cobradas por ellos.

          Un empresario que conocí, me dijo que sólo iba cuando los acompañaba el rey, pues con ministros y presidentes, no se traía suficiente trabajo o acuerdos para repartir. No sé cuál será la realidad, pero un rey totalmente honesto, no habría podido acompañar y hacer negocios con tanto corrupto, porque los tendría que haber denunciado y los gobierno no habrían aguantado más de dos viajes del rey.

          Pero es un paso más en que seamos republicanos, es el Jaque al Rey, de una izquierda, que dedicada a repartir las ayudas que una vez más nos enviará Europa para que podamos vivir, ha enviado a sus medios de comunicación a distraer la atención, y de camino seguir hacia la República, donde el Poder Absoluto lo tenga el partido que gane.


sábado, 8 de agosto de 2020

MEDICACIÓN INTERMINABLE

 

          Es curioso que en todas las filosofías de desarrollo personal, espirituales o religiones, se enseñe la inexistencia del ego o el peligro que representa en cualquier práctica, social o espiritual, para alcanzar las metas humanas o divinas.

          En cambio, la mayoría de las enseñanzas y prácticas, están principalmente dirigidas a curar las interminables enfermedades del ego. Algo inexistente, algo que enferma el Ser, que tiene como naturaleza la enfermedad en estado crónico.

          A lo largo de los años de practicar reflexología podal, he intentado que todas las personas que han venido a terapia sin excepción, practicasen: Estar comiendo a la hora de comer, comer lo que tienen en el plato, disfrutar de hacerlo, masticar bien y ser conscientes una vez que saben lo que tienen en la boca si desean tragarlo o no, o si por el contrario deben de hacerlo. Siendo que lo sólido de los alimentos se relaciona con la mente.

          El mundo emocional se relaciona con los líquidos, y de ellos sólo el agua me interesa. Un líquido incoloro e insípido, que no cambia el color o el sabor de las emociones que vivimos. Que forma la mayor parte de nuestro cuerpo físico y del aprendizaje al vivir.

          Para ellos cuando se conocían o eran familia, les parecía que a todos les digo lo mismo, cuando los médicos para enfermedades diferentes, les recetan medicinas diferentes. Algo que les hacía pensar que es sólo palabrería y que no hace nada, haciendo que algunas personas dudasen de la terapia.

          El masaje hace su efecto, es la medicina que mata o transforma la enfermedad. Pero qué se puede hacer para quien no deja de producir la enfermedad. No importa que esta cambie, que se manifieste de forma diferente, al final el destruir una expresión de persona enferma, no cambia la naturaleza de la persona, no cambia el que sea creador de enfermedad.

          Todo el desarrollo personal y por tanto nuestras vidas, están dedicadas a que ese desarrollo nos convierta en seres humanos y que la materia y el espíritu sean las dos piernas que nos muevan por la Vida, las dos manos que creen el cielo y abracen a Todo cuanto manifieste la Vida.

          Ese al menos es el desarrollo personal, que encuentro que señalan las filosofías y religiones.

          Es el ego el que crea y piensa que alguien nos creará y llevará a ese Universo. El que nos dice que es el médico quien curará nuestras enfermedades. Que hay medicinas que destruyen, transforman y erradican las enfermedades de nuestras vidas.

          Somos personas enfermas, que tienen la fortuna de que hay alguien o algo, que las convertirá en personas sanas, felices, y carentes de ego. Que seremos llevados a una UCI, donde viviremos eternamente y sin posibilidad de enfermar o escuchar a ese ego, que necesita ser creado cada ahora para que nos hable.

          En nuestro plato, el único alimento que sirve a nuestro Ser, es vivir.

          Vivir, disfrutar de hacerlo sin mirar las condiciones, masticar cada instante para aprovechar al máximo nuestras vivencias, aceptar cada momento sin discriminación, es lo que repone nuestra energía para ser lo que somos.

          El expulsar, el cagar y mear todo lo que no asimilamos o se convierte en lo que somos, impide que nos envenenemos la vida y permite alimentarse a todos aquellos que se alimentan de lo que no necesitamos, puesto que la Vida, no tiene sobras o desperdicio.

          En el Plato del Ahora, el único alimento que nos es presentado es lo que somos. Que no nos puede envenenar, ni enfermar, donde no cabe el ego que nos contagie de sus enfermedades y que no existe si no lo creamos y aportamos a nuestro plato como condimento.

          No hay mejor cura que no enfermar, ni mejor medicina que la aceptación de que podemos transformar en lo que deseemos lo que estamos siendo, pero es lo único que tenemos como alimento, por lo que hay que disfrutarlo, masticarlo y asimilar lo mejor para crear al nuevo ahora.


jueves, 6 de agosto de 2020

NATURALEZA DEL AHORA

        
Lo complicado del Ahora, es que existiendo Todo en Él, no puede haber nada existiendo en el Ahora.
          En el Ahora, no hay nacimiento, ni tiempo, ni espacio, no hay percepción o perceptor. No habiendo principio o existencia de algo: ¿Qué podría morir o ser destruido?.
          A veces es el galimatías del Concepto, necesitando algo que lo cree, este Creador sólo puede crear lo que ya existe, dándole un nombre que lo diferencie o por el que pueda ser reconocido.
          Nosotros le damos el nombre, definimos el Concepto, pero el Ahora existe sin haber nacido, sin que tenga un principio, por lo que al darle nombre, certificamos que cuando nuestra mente, esa que necesita del yo o de un portador, le dio nombre era porque existía con anterioridad.
          Leía hoy una pregunta que dice que: “Antes de ver, antes de sentir, antes de pensar: Qué es la Mente”.
          Es una pregunta frecuente del budismo, en muchas formas, con enfoques diferentes, se trata de que se responda a: A qué hay antes del nacimiento, antes de que algo comience, que hay antes de Buda.
          Shakyamuni dice que Todo Es Vacío, por lo que Buda Es Vacío, así como toda manifestación de su Naturaleza.
          En el Aquí y Ahora, sólo hay Ahora, porque no hay nada que pueda existir en un Aquí sin espacio, pero tampoco hay Ahora en el Aquí, porque en el Ahora no hay tiempo para nacer o morir.
          El Ahora es Eternidad, más que ausencia de medición de tiempo.
          El Ahora carece de tiempo, al situarse entre pasado y futuro, que no pueden existir en Él.
          Por lo que nos quedaría ese Vacío del que nos habla Shakyamuni.
          Es en el entendimiento del Ahora, en el establecimiento de su Naturaleza, donde podemos encontrar a esa nada que siente hambre, alegría, dolor, amor, miseria, sólo por haber creado el tiempo en el que nacer, necesitando crear un lugar en el que manifestarse, tratando de retornar a ese Ahora, donde conservar su yo, agrandado, perfecto, incluyente, pero suyo.
          Si pudiésemos entrar en el Ahora, veríamos la existencia de todos los multiversos, sin pasado, sin futuro, sólo en estado presente, en manifestación del Ahora.
          Nuestras vidas en su completa existencia, con cuantas reencarnaciones si existen, con la totalidad de la familia que nos ha traído y la que nos llevará al futuro infinito, en estado de Presente.
          Porque no hay pasado o futuro en el Ahora, toda la Eternidad se manifiesta como Presente, sin que esté sucediendo en sucesión, sin que exista un devenir, o un karma que lo origine.
          En el Ahora, no hay algo que le pueda dar nombre.
          En el Ahora, no hay lo que le pueda conceptualizar.
          En el Ahora, hay desconocimiento absoluto de Ser Ahora.

          En el Ahora, sólo hay un Buda Sin Nombre, Sin Naturaleza, Sin Universo.

          Por eso nosotros le llamamos Vacío, igual que hizo Shakyamuni, pero tan diferente nuestro vacío, del Vacío que Él soñaba que existía en el Ahora.