¿Quien no ha
visto o sentido la muerte de un ser querido?
En mi
búsqueda para encontrar quién soy, conocer mi realidad y saber mi función Aquí,
a veces la pregunta ha sido:" si existiría yo, sin toda la vida que ha habido
anteriormente". Los científicos, me hablan de una vida en evolución, que ha sido
mi origen. Lo que me ha llevado a preguntarme, ¿si los conocimientos y
experiencias de los dinosaurios y demás tipos de vida, han creado y están en mi
ADN, quiere esto decir que ellos de alguna manera siguen viviendo en mí?.
Siendo esto
importante, lo que de verdad me crearía problemas es pensar, que al morir el
cuerpo de mis padres o seres queridos, ellos habían muerto real y totalmente.
Morir, lo que
se dice morir realmente, muere aquello que nos es indiferente, porque nunca le
hemos dado vida, en nosotros.
Lo que hemos
amado u odiado, sigue viviendo en nosotros, con nosotros. Cuando hacemos algo
que hemos aprendido, o hecho por o para alguien, ese ser vive en lo que estamos
haciendo. El amor y su otra forma (el odio), hacen que todo lo que ha estado
realmente en nuestras vidas, viva toda nuestra eternidad en nosotros, en nuestro
eterno ahora, en nuestro eterno hoy. Nuestra existencia es eterna, porque dura
toda la vida (la nuestra).
¿Cómo puede
morir lo que realmente ha existido?, ¿quién puede dejar de existir, mientras la
vida continúe, y haya alguien con quien compartió algo?
Es triste que
algo muera, que su vida o su muerte no esté de acuerdo con nuestros patrones,
que el momento en el que se produce, no sea el adecuado o el correcto, según
nuestras reglas o conceptos, del funcionamiento de la vida.
Cuando se
termina la función del desayuno, nace la hora de comer y entre ambos momentos hacemos otras cosas, todo sigue su ciclo y una opción deja el sitio a otra, en una continuidad
eterna, donde el pasado siempre está vivo en el presente, al ser su creador.
En nosotros,
toda y todas las vidas que compartimos, continúan siendo y formando parte de
nuestra vida, de nosotros, de la
Vida , por medio del Amor, del interés y entrega puestos, en
los momentos compartidos.
Lo que sí me
parece realmente triste, es tener el sentimiento de haber perdido algo, tras la
muerte de un ser que ha estado en mi vida. El no ser capaz de apreciar lo que
he recibido, lo que me ha sido entregado, para mi enriquecimiento como ser, por medio de esa relación. Creer, que nuestro Amor mutuo puede permitir que muera
antes que yo, que ha muerto, porque no puedo mantenerlo vivo en mí.
Cuando he mirado fijamente a la muerte,
solamente en la indiferencia la he visto crecer, no porque pueda vivir en ella,
sino porque no puede nacer la
Vida.
Cuando he mirado fijamente a la
muerte, solo he visto vida en ella, porque cuando se mira algo desde el amor,
los ojos que ven son los del Amor, la
Vida.
Si la vida es
el
encuentro de la Nada, lo que da sin tasa,
podría
ser lo que Dios
aquello
que muere,
o lo
que nace,
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