Las Reglas Simples de la Convivencia se resumen en dos:
Amarás la Vida sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo.
Amarás la Vida sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo.
Hace mucho tiempo, incluso antes del universo, la convivencia era simple. Lo que había, era para ser usado libremente por todos y nada tenía dueño, la esencia, la naturaleza de la
convivencia era la libertad. El agua podía viajar en las nubes por el cielo, por el universo en los cometas; el fuego vivir en las estrellas o en la oscuridad de las profundidades planetarias, viajar junto al agua subido en un cometa por el universo. Los alimentos eran vida alimentando la Vida. Todo ello en una perfecta anarquía de libertad, con una sola regla, una sola ley: AMOR.
convivencia era la libertad. El agua podía viajar en las nubes por el cielo, por el universo en los cometas; el fuego vivir en las estrellas o en la oscuridad de las profundidades planetarias, viajar junto al agua subido en un cometa por el universo. Los alimentos eran vida alimentando la Vida. Todo ello en una perfecta anarquía de libertad, con una sola regla, una sola ley: AMOR.
Un día el hombre desterró de su corazón la Ley, y la Vida en su profundo Amor le pidió a Dios que se la escribiese y explicase un poco en piedra, para que fuesen duraderas.
Para entonces, la convivencia había sido conducida por el hombre a un sistema, en el que la anarquía no podía vivir, podríamos llamarla convivencia comunista o socialista. Su organización: los reyes, los jefes, las iglesias, los mandamases eran dueños de todo y le daban al pueblo lo que ellos decían que necesitaban. Sus leyes: obediencia y amor al fuerte, llevar el pelo corto o largo según ellos decidían qué era mejor para la convivencia, donde, cómo, qué y cuando era conveniente que se hiciera o dejara de hacer algo, y la libertad nos fue dada para hacer lo que nos era ordenado, para nuestro bien y el de la convivencia.
En nuestra búsqueda de una mayor libertad, destruimos las piedras y encontramos una manera fácil y rápida de escribir reglas y leyes, para controlar que la convivencia fuera perfecta. Así que las plasmamos en papel, esto nos permite corregirlas con mayor facilidad.
La primera ley es: Amarás al dios que te de todas o al menos más cosas.
2.- El nombre de dios es poder, riqueza, y estar por encima de los demás
3.- Vivirás cada día siendo el señor y poseedor de todos y todo
4.- Te aprovecharás de los padres y las madres y también de sus hijos.
5.- Te enriquecerás con las guerras, abortarás en buffet libre, y destruirás el honor y la dignidad de
los otros.
6 y 7.- Todo me pertenece, lo que me da derecho a actuar y utilizar a las personas y cosas como quiera.
8.- Soy el poder y lo que digo es la única verdad.
9.- La pureza de pensamiento reside en que penséis lo que os ha sido ordenado. No debéis tener
deseos porque nada os pertenece, todo es del poderoso.
10.- Todo pertenece al estado y los poderosos.
Ante la facilidad que tenemos en nuestros días de escribir nuevas leyes gracias a la informática. Todo esto ha sido ampliado para un mejor entendimiento del pueblo:
“Queridos borregos, os amo por vuestra lana”.
Algunos descontentos con este tipo de convivencia, crearon nuevos grupos de poder, son los llamados administradores que también suelen ser llamados “de derechas”.
Publicado anteriormente el 6-1-14
No hay comentarios:
Publicar un comentario