AQUÍ Y EL MUNDO

          Tenemos en la actualidad algunos temas como el del referéndum colombiano, en el que no han aceptado la paz, como dicen algunos y que no han aceptado la indignidad como dicen otros.

          A veces las palabras bonitas, como: “Democracia, convivencia, amor, paz, ..”, pueden esconder la ponzoña y la podredumbre en su interior, algunas veces la paz significa aceptar la indignidad, el amor venderse, la convivencia perder la autoestima al aceptar el abuso ejercido sobre ti y tu familia, entregar lo que te han robado a los ladrones, olvidar el asesinato de tus seres queridos, el abuso sobre las personas que amas.

          Pero estamos hablando de “La Paz”, no podemos encontrarla sin dignidad. Los asesinos deben reconocer lo que han hecho, tienen que devolver y restaurar en lo posible el daño causado.

          ¿Han devuelto las casas y las propiedades robadas?, es algo que puede hacerse.

          ¿Han retornado las tierras que han obligado a criar drogas, a su estado de labranza?, es algo que pueden hacer o al menos ayudar a hacerlo a los propietarios.

          Hay otras muchas cosas, como las dignidades avasalladas, las vidas destruidas, los asesinados, las niñeces que han destruido convirtiendo a niños en asesinos, personas sin dignidad y sentimientos, o en simples cuerpos usados para satisfacer sus lujurias, o enseñando a los niños a violar a quien fuese solamente por darles un arma. Esto son cosas que solamente pueden pedir perdón y si es sincero ayudar a las familias y a esos niños a crecer lo mejor posible.

          Pero lo que piden es quedarse con lo robado o al menos en gran parte, continuar muchos de ellos en el tráfico de estupefacientes y de personas, o ser los matones de los pueblos, o las bandas que extorsionen y roben. Esa es la paz que no puede ser aceptada, porque será seguir lo mismo pero legalizado. Con sus jefes en el gobierno o al menos en el Congreso y poderes políticos, con buenos sueldos, servidores, seguidores y posibilidades de seguir robando y abusando.

          A veces hay que elegir, pero no es fácil. Todos soñamos con la paz, pero no solamente dependiente de nuestra obediencia y pérdida de la dignidad. Todos soñamos con una vida mejor, donde todos nos dediquemos a mejorar la sociedad, pero no es que si dejan de robarnos con armas, lo hagan con la ley y la posición social, lo que mejorará la vida del pueblo.

          Deseo que Colombia encuentre la paz y la dignidad, que los asesinos se hayan arrepentido de verdad y quieran ser perdonados y restaurar el daño causado, que los que han tenido que huir de su tierra y propiedades, amenazados por los terroristas, les sea devuelto y puedan volver donde viven sus amigos y sus raíces.

          Nosotros tenemos a la gentuza de Bildu, sin arrepentimiento, sin reparación de daños, sin renuncia de sus imposiciones, legalizados, bien pagados, con las caretas de niño bueno para esconder algunos de ellos sus caras asesinas, y solamente hemos tenido que tragarnos la dignidad, para que dejen de asesinar los cuerpos, sin abandonar las armas por si les interesa volver a asesinar, pues es lo único que han dejado claro, siguen defendiendo el asesinato a quien no esté de acuerdo con ellos.

          Tenemos también a Rivera, culpando por adelantado a Rajoy si no hay investidura, ya que tiene que aceptar que el PSOE, que está acojonado por unas nuevas elecciones, no esté dispuesto a ayudar a que un gobierno que no sea suyo arregle España y la vida de los españoles, por lo que no se le puede pedir un acuerdo de estabilidad, solamente hay que ir a la investidura con los 134 diputados y después aceptar las leyes y presupuestos que decidan los demás que son mayoría.

          Sr. Rivera y señores del PSOE, no se trata de investir un monigote para que lo usen. Los españoles queremos y pedimos un gobierno, que pueda poner en práctica sus ideas, y si están equivocadas cambiarlo. No pretendan seguir haciéndonos gilipollas, con su verborrea.