Hemos
creado tantos caminos, para encontrar la Humanidad, para encontrar nuestros
sueños de lo que somos, para hacer realidad los Conceptos que nos llevasen a
poder sentirnos en paz con nosotros mismos siendo lo que somos en cada
instante, que no podemos explicarnos al mirar a nuestro alrededor cómo ha sido
posible que hayamos llegado a esta sociedad, que no nos da apenas nada de lo
que hemos buscado.
Nuestra
forma de mirar cuanto nos rodea, la forma de mirarnos a nosotros mismos
solamente puede sumirnos en el estupor, en el no ser capaces de saber encontrar
el camino que nos lleve al otro extremo de lo que somos.
Hemos
llegado a negar tanto nuestra responsabilidad, nuestra libertad, nuestra
capacidad de hacer y crear lo que somos, que hemos olvidado el por qué y el qué
significan esos conceptos que creamos para saber lo que deseábamos ser.
Buscamos
el Amor, en lo que sentimos que somos amados por los demás, ni tan siquiera nos
es suficiente ser amados. Ser amados de la manera y forma, en que los demás aman,
no en cómo queremos ser amados.
Buscamos
la Libertad, en que alguien dicte leyes a nuestra medida, en que los demás nos
respeten, en que Dios nos permita manifestar nuestros deseos, sin pensar en las
responsabilidades, en la libertad de los demás.
Buscamos
la Felicidad, en poseerla, en tenerla, en que nuestros deseos se hagan
realidad, en que los demás giren a nuestro alrededor, cuándo y cómo deseamos,
no cuando a ellos les apetezca o venga bien.
Miramos
nuestras vidas, por lo que tenemos, por lo que recibimos, por lo que deseamos y
por el comportamiento y servidumbre del entorno, no por lo que somos.
Me
preguntaban por la serpiente amiga de Eva, el sacrificio del Espíritu para
poder abrazar la dualidad en la que Eva y Adán pudiesen vivir. La entrega de
ser Absoluto, a permitir que las partes, la Creación pudiesen manifestarse en
Libertad, en una relación, en la que cada individualidad pudiese vivir el Amor
de la entrega al resto de la Individualidad Absoluta.
En una
convivencia, en la que la entrega proveniente de ese Amor hiciese innecesaria
la pregunta de si eran felices.
En una
Dualidad, llena de infinitas individualidades, existiendo en la Individualidad
Infinita, al no haber percepción de separación.
Hemos sido
nosotros los creadores de los Conceptos, que esa Vida conlleva, que le son
necesarios para existir en la trascendencia de la Unidad.
Pero hemos
olvidado lo que somos, para mirar lo que deseamos ser. Hemos olvidado que el
resultado es la manifestación de lo que somos. Que no hay más Amor, más
Libertad y Felicidad que la que somos siendo manifestación de Vida, de lo
Absoluto que nos ha permitido vivir lo que somos, algo que le es negado a: “La Vida, al Amor, a
la Libertad, a Dios o el Espíritu”.
Ser lo que
tenemos, lo que poseemos, hace innecesarios los Conceptos pues solamente es
necesario contar, valorar y saber el precio el valor que tenemos o somos.
Manifestar
Principios y Valores, sin separaciones, sin posesiones, nada que conseguir o
perder, es lo que hace que no tengamos precio o límites, simplemente siendo lo
que somos. Una parte, que no puede dejar de ser Todo.
La Serpiente "Amiga", me a quedado claro... La Unidad dentro de la Dualidad... 🙂
ResponderEliminarSer gratitud, es lo que nos ayuda a no vivir olvidados de vivir... Sin manifestación alguna más que la mera Gratitud de lo que somos...
En la Gratitud de que todo lo que es, es, no hay necesidad, no existe la búsqueda.... La gratitud para mí maestro lo todo, el absoluto, el infinito y a la vez ese vacío me funde en un movimiento gratificante, porque cuanto más agradezco más grande es mi esmero de agradecer... Mi ser es Absoluta Gratitud y es lo que hace que cada ahora me edifique como un buen ser Humano.... 🦋