ACUERDOS DE LA VERGÜENZA

          Que la política dé asco es lo natural, pero a veces, mirando los acuerdos, las negociaciones, las explicaciones, las descalificaciones y lo que cada uno hace, además siento vergüenza de que pretendan convencerme, de que me están sirviendo, que me están ayudando a mejorar la sociedad donde vivo o que lo hacen por mi bienestar.

          Las críticas a pactar con VOX, el término de ultraderecha que vale para Ciudadanos, PP o VOX, el escándalo que supone, el pactar la derecha con partidos del espectro de la derecha para llegar al poder, me hacen pensar que quizás la única manera de que España pueda tener un gobierno sería elegir siempre a las izquierdas y desterrar a la derecha.

          La izquierda, puede pactar siempre con quien desee, incluso con la extrema derecha del PP, cuando hubo un lehendakari Socialista. Donde no importó que se consiguiera con los votos de la ultraderecha.

          Pero si Ciudadanos o el PP, tienen que pactar con VOX un partido con unas ideas poco conocidas y que no se sabe con certeza, dónde se situará cuando tenga algo de experiencia mandando, es una vergüenza, un escarnio, antinatural pues la extrema derecha es el diablo.

          En cambio, pactar con: Independentistas, terroristas, extrema izquierda, nacionalistas o con extrema derecha si es necesario, realizado por la izquierda o por los socialistas que están donde haga falta si tienen el poder, se llama progresismo de una mente política abierta y sin cinturón sanitario, si es para ser el poder.

          Ciudadanos se niega a hablar y aceptar algo, que pueda ser aceptado de lo que piden los de VOX y que pueda ser beneficioso para muchos ciudadanos. Cualquier decisión es buena para muchos y mal para muchos. Por lo que sería suficiente con que no hubiese muchos perjudicados, si es que quieren gobernar para el bien de los ciudadanos.

          Pero me sorprende más aún, las soflamas y quejas socialistas, así como la adjudicación de que cualquier derecha que compita con ellos por el poder: “Es Extrema Derecha”.

          En España creo, que comienza a popularizarse en la 2ª República. Tras ser destronado el rey, se hicieron unas elecciones, para establecer un presidente que comenzara una República Española. Al parecer fueron ganadas por la derecha de entonces, pero con un pucherazo, el presidente fue de izquierdas, comenzando a gobernar los partidos de izquierdas: Socialistas y Republicanos. Muchos partidos, todos peleando por mandar y ser los líderes, tratando de cambiar todo lo viejo, pero no creando nada más que palabrería. Ninguno mandó el tiempo necesario para hacer lo que decía, por otro lado, no sabemos si fue por falta de tiempo solamente.

          Líos, peleas, jaleo, odios, abusos, tratar de erradicar la religión de la sociedad, armar a grupos que defendían sus ideas y realizaban acciones fuera de la ley y a veces abusos para beneficio propio, lo que llevó al enfrentamiento de hermanos contra hermanos, una mitad contra la otra, simplemente porque los políticos querían ser los que mandasen, cuando su trabajo y función es servir al pueblo: “De derechas, de izquierdas, de centro, buenos y malos, hombres, mujeres y niños, animales y plantas, ríos y campos, todo cuanto es un país, una sociedad, un pueblo.

          Al final una guerra y el oro que había, regalado a Rusia. Para entonces el PSOE ya tenía poder, interviniendo en ello.

          La democracia llegó, pero también Zapatero y de nuevo un PSOE Republicano: Ruina, paro, exhumaciones, memoria histórica para el restablecimiento de continuación social desde 1935. Firmando la paz con ETA, que pudieron recoger la información oficial, desde los partidos que crearon y que conseguían manejar y ganar más dinero, siendo políticos y pudiendo conseguir lo que los había llevado a ser asesinos: “Apoderarse de Navarra y ser independientes”, al parecer hay quien piensa que es barato.

          Unos años de recuperación y Sánchez: “No es no, no dejando que formase gobierno quien ganó las elecciones, insultando en los debates, obligando a nuevas elecciones, negándose a pactar con el gobierno o haciéndolo para dejarlo con el culo al aíre, que pretende continuar donde lo dejó Zapatero”.

          Una moción de censura, con independentistas, batasunos, nacionalistas que recibirán más que antes y en la confianza de que recuperarían el poder seguir adoctrinando en Navarra, pues no han dejado de hacerlo en la Comunidad Vasca.

          Y presidente: exhumación, memoria histórica, líos con la Iglesia, erradicación de la derecha (Toda es extrema), y bloquearla para que no pueda tener gobiernos en ningún lugar, pactando para gobernar ellos, o ayudando a batasuna a seguir adoctrinando en Navarra, o independentistas gobernando en Cataluña gracias a ellos.

          Pero lo que le extraña al socialismo es que: “PP o Ciudadanos no les permitan gobernar, eso sí hacerlo con sus amigos (los de Pedro) que espero no sean del socialismo”.

          Al final, como pasó en la República: “Pactos espurios, todos contra todos, olvido del pasado, división de la sociedad en dos bandas enemigas, ciudadanos con el culo al aíre, los políticos hablando de lo suyo, de lo que quieren llevarse y de sus conveniencias”.

          Lo bueno de ello, es que ya no nos avergonzamos de estos políticos, nos hemos acostumbrado y no esperamos que nos sirvan. Lo dicho, con el culo al aíre y sonriendo.