LA IGNORANCIA

           Hace muchos miles de años, nacieron la gratitud y el miedo, anunciando el nacimiento de la Religión.

          Cuando creamos los dioses de la Naturaleza, agradecíamos lo que esta hacía por nosotros, dándonos alimento y cobijo. Al mismo tiempo temíamos sus cataclismos, sus elementos, que no podíamos controlar.

          Al poco tiempo, se descubre, que el hombre hace enterramientos y ceremonias a sus muertos. Han dejado de quedar en donde mueren mientras la tribu o el grupo, sigue su migración buscando alimento.

          La consciencia humana, nos ha permitido unir nuestra dependencia de la Naturaleza y de la Tierra, del Sol y la Luna, de las estrellas para orientarnos en la oscuridad de la noche, para entender que en el Universo todo es interdependiente. Que la falta de una sola individualidad, haría que el Universo fuera diferente, que lo que Es, lo es precisamente porque admite todo cuanto existe o no existe en su Ser, algo que sólo sucede en el Ahora.

          Comienzan los Dioses que viven en algún lugar, que nos controlan ayudándonos y castigándonos según les servimos. Pero lo que la Consciencia nos ha enseñado es que hay una interdependencia de todo cuanto existe en el Universo. Algo que debió de llevarnos hacia el monoteísmo.

          Desgraciadamente, cometemos una y otra vez el mismo error, necesitamos que nos expliquen nuestra relación con los dioses o con Dios, y necesitamos conocerle por un nombre, que nos dice quien nos explica su mensaje, aunque sea el de Sin Nombre.

          Es algo que me ha llevado a preguntarme, ¿Hasta donde profundiza nuestra ignorancia?, ¿Hasta cuando seremos borregos, manejados por pastores y sus perros?.

          Obviamente si nos han dicho que todo y todos somos Uno, cuando le hacemos algo a alguien, nos lo estamos haciendo a nosotros mismos, independientemente de cómo nos sintamos.

          Si nos dicen que el mensaje que nos quiere dar alguien, es que: “Olvidemos el ojo por ojo”, que dejemos de ser rencorosos, envidiosos o que nos neguemos a respetar a los demás. Preguntemos los motivos, y decidamos lo que es justo, olvidando la venganza, es lo que parecen querer decirme.

          No entiendo que alguien tenga que explicármelo, que decirme que si sigo vengándome, la felicidad será imposible y que nos llevará a una guerra eterna.

          Si nos dicen, que la salida está en el Amor sustituyendo a la venganza: “Amaos los unos a los otros, amad al prójimo a lo demás, a todo cuanto existe, como a vosotros mismos”. Tampoco entiendo que necesite que alguien me explique, algo tan simple: Todo es uno, y si convivimos amándonos seremos felices y viviremos en el cielo y si lo hacemos en la venganza, lo haremos en el infierno e infelices.

          Si Dios es Todo, si yo daño una parte, dañaré a Dios y por tanto a mí mismo.

          No hay salida, no hay dentro o fuera, si somos Un solo Universo, su Armonía, su Equilibrio, la forma de manifestarse, dependerá de nosotros, de cada uno, porque nacemos y somos Naturaleza de Libertad, por lo que es nuestro Libre Albedrío el que creará desde nuestra responsabilidad el Universo, el Dios que somos.

          No hay una Religión que pueda ser enseñada, sólo puede ser vivida individualmente, y crear el cielo o el infierno, en nuestro vivir, nosotros mismos, no la Religión.