PS- Me siento avergonzado Maestro.
M.- Sentir
vergüenza sin causa es inútil, sentir vergüenza con causa también es inútil.
Porque es preferible usar el tiempo en corregir aquello de lo que te
avergüenzas.
PS- Maestro,
anoche me desperté, no veía nada, no oía nada, pero sentía miedo.
M.- De qué.
PS- De la
muerte.
M.- Aquél que
sabe vivir, no teme a la muerte, puede caminar sin miedo al rinoceronte, ni al
tigre y nunca será herido en combate.
PS- ¿Cómo puede
ser eso?
M.- Contra él,
el rinoceronte no encuentra donde clavar su cuerno, el tigre ningún lugar donde
enterrar sus garras y las armas ningún lugar donde herirle.
PS- ¿Por qué es
eso así?
M.- Porque en
el hombre que sabe vivir, no existe lugar por donde pueda entrar la muerte.
Temer lo inevitable, es perder el
tiempo, pues nos impide vivir realmente. Pero el temor a la muerte, incluso nos
impide nacer, al no poder vivir el Ahora que es nuestra muerte del pasado y
nacimiento al futuro.
Quien vive realmente, sólo existe como
Ahora, por lo que no puede crear ego o aferramiento a algo. No tiene nada que
perder, nada que ganar, al no haber algo viviendo, sino la manifestación de la
Vida misma, que sólo existe en el Ahora, que puede ser algo sin tiempo, o la
misma Eternidad.
La muerte o transformación de lo que
algo es, no es la desaparición de algo, sino su transformación. El que algo
muera, sólo es posible si la Muerte vive, y lo que vive, es manifestación de
una Vida única, que se manifiesta en lo que Es, en el Ser del Ahora.
Vivir realmente, es cambiar
continuamente cuerpos, que llega a un punto en el que los cambios por
reparaciones o pequeñas modificaciones, ya no es posible. Ha envejecido, no
funciona correctamente y hay que usar sus materiales, para crear uno nuevo,
recién nacido, que irá cambiándose por joven, adulto y nuevamente envejecerá. Vivir
implica no tener otra opción que ser manifestación de la Vida. Tener un cuerpo, significa ser el responsable
de cómo manifestamos la Vida nosotros, si es la Humanidad, el cielo o el
infierno y la carencia de humanidad.
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