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Yui Shin

viernes, 24 de enero de 2014

EL DESEO

          Muchas personas se preguntan por el origen de la vida y su propósito.
          Por los escritos de los antiguos, con sus historias y leyendas, yo diría que el origen de la vida ha sido el deseo.
          En general y de una manera u otra, es el deseo de un dios, de algo o por algo lo que origina el universo y el hombre.
          En el cristianismo, es el deseo de dios de que Adán y Eva no comiesen de un árbol concreto, el origen de un dios único; que al desear que el hombre no supiese sobre el bien y el mal, origina el concepto de dualidad, o lo que es lo mismo, “al haber un dios, implica el nacimiento de la dos mitades”. El deseo de Adán y Eva por adquirir poder y conocimiento, igualándose a dios, es el comienzo de la vida, su origen.
          Posteriormente: es el deseo de ayudar al pobre, el origen de la pobreza en la vida; el deseo de ayudar al rico, origina también la pobreza; el deseo de conseguir, origina: el sentimiento de que falta algo, la insatisfacción, el estrés y la infelicidad. Todo deseo, origina el no vivir. Esto es lo que me asegura más firmemente en mi idea, de que el origen de la vida es el deseo.
          Siendo el deseo el origen de la vida, cuál puede ser su propósito. Supongo que mantener vivo el deseo en nosotros, para lo cual, su esfuerzo principal debería ser el de que no lo consigamos, originando una insatisfacción permanente, que mantenga el deseo y alargar su final (el de la vida), lo más posible. Si no hay deseo significaría el final de la vida.
          Es por ello que mientras las personas buscamos la felicidad en los sitios equivocados, tratamos al mismo tiempo de que la ventana con vistas a la Humanidad no sea abierta.
          ¿Qué se ve desde esa ventana?
          El Mumonkan dice que no hay puerta, en la Humanidad tampoco hay ventana. Pero a través de la puerta, desde la ventana se llega y se deja de ver, la Vida.
          En la Nada, no puede existir el deseo, que la haría algo.
          El Todo, ¿qué podría desear?
          El Todo, solamente puede existir donde hay Nada. Solamente la Nada puede acoger Todo.
          En ninguno de ambos casos, existe capacidad para acoger al deseo. Es por ello que no pueden ser origen de la vida y solamente pueden ser sinónimos o descripciones, de la Vida Eterna y sin origen, de un Absoluto sin deseo, que simplificando llamamos: Dios, Vida, Amor y, entre y para nosotros, Humanidad.
          Por ser el deseo el origen de la vida, su ley principal dice: “Si un solo átomo no desease mejorar o no mejorar, originaría el fin del universo”.
          Todo lo que tiene principio, tiene final; polvo al polvo; todo vuelve al origen; así como es arriba es abajo; etc.
          El deseo es el origen y es el final de la vida, no importa el átomo, lo que debería importarnos es el deseo. ¿Quién vive realmente, cuando desea?



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