Esta mañana
mirando la página “foto de Mayre”, me he encontrado con una cita de Paulo Coelho
que dice: “No es grande el que nunca falla, sino el que no se da por vencido”.
Coincido en
que es una frase hermosa, pero al mismo tiempo he recordado al “arquero Zen”. ¿Cuál
es el misterio de este arquero que nunca falla, que no comete error alguno?.
Durante años,
practica incansablemente bajo la supervisión de un Maestro, miles y miles de
flechas viajan imperturbables en el aire, quedando siempre fuera del círculo
pintado, meta y final de su viaje. Lugar del deseo del arquero, donde quiere
poner su flecha.
Una y otra
vez el Maestro le mira sonriente y el arquero se siente frustrado de ser tan
inepto, viendo burla en lugar de amor.
El cansancio
y la frustración llevan al arquero hasta la desesperación. Un día se olvida de:
su flecha, su arco, su deseada diana, su triunfo, avanzar o retroceder y apenas
la flecha sale libremente, sin ser empujada por la cuerda del arco o el deseo
del arquero, vuela eternamente en el centro de la diana.
La Vida, el único
y verdadero Gran Maestro, siempre acierta, no hay equivocación posible, “Pinta la diana, alrededor de la flecha”. Es
por ello que la Vida no tiene: deseos, metas, frustraciones, derrotas o éxitos.
Cuando algo aparece, la Vida se entrega absolutamente sin discriminación,
cuando hay algo que no aparece, la Vida se entrega igualmente a ese algo, sin
discriminar su inexistencia. Primero es el objetivo, la diana, la Vida siempre acierta
en el mismo centro, entregándose y aceptando absoluta e indiscriminadamente ser
lo que la diana es.
Nosotros, en realidad no
fallamos, por ello sonríe el Maestro, la Vida. Sabe con total
seguridad, que tarde o temprano, nuestro cansancio y frustración nos hará
olvidarnos, de decidir primero lo que las cosas y la vida deben ser, para
comparar después, cómo son. Es lo que nos ha llevado al sentimiento de derrota,
de frustración y de no aceptarnos, buscando algo externo que nos diga que somos
buenos.
La Vida nunca se equivoca, nosotros somos
Vida y nunca fallaremos, cuando nos entreguemos y aceptemos sin discriminar. Solamente
el ego está continuamente equivocado, el Amor nunca. Pero el sentimiento de
amar implica: arquero, arco, flecha, deseo, …… Ser Amor, implica: entrega,
aceptación, ausencia del concepto discriminar, Unidad sin dualidad, acortando
podemos decir: Vida.
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