A
veces, el origen de la falta de entendimiento, es simple y está fundamentado en
la semántica. Es solamente, una cuestión del uso que le damos a las palabras.
Es natural
que el lenguaje, al ser algo vivo, vaya adaptándose al uso y significado que en
la vida diaria, vamos dando a cada palabra, cada frase. También debería ser,
que los ciudadanos y estudiantes de una lengua, tuvieran algo más de curiosidad
por su medio de expresión, que su uso para andar por casa, entender
publicaciones sin ninguna profundidad o tener que traducir cualquier libro, que
tenga un significado simplemente serio.
A veces un “koan”,
sin tener que ir a significados profundos, sin necesidad de años de Meditación,
simplemente con algo de conocimiento de las palabras y sentido común, leído
algunos libros y lo que siempre es necesario en Zen, no estar llenos de uno
mismo, podríamos al menos saber donde están los errores o aciertos de las
preguntas y a veces de las respuestas.
Joshu comenzó la práctica Zen cuando tenía sesenta años y continuó
hasta que tuvo ochenta. Antes de realizar su seidad Zen. Enseñando desde la
edad de ochenta, hasta que cumplió los ciento veinte.
Un estudiante le preguntó un día: "Si
no tengo nada en mi mente, ¿qué debo hacer?"
Joshu respondió: "Tíralo
fuera."
Preguntando de nuevo "Pero
si no tengo nada, ¿cómo puedo tirarlo?" .
"Bueno," dijo Joshu, "entonces cárgalo, llévalo fuera."
Mi madre cada
vez que le pregunté: ¿”Mamá, donde pongo los zapatos de invierno”?, siempre,
cada año, me contestaba: “En una caja vacía”.
No se quien
aprendió de quien, pero Dios hizo lo mismo, puso el Universo en donde había
Nada, la caja vacía; las constelaciones lo copiaron también y pusieron a cada
estrella donde no había otra; es algo que es constante en todo, en los átomos,
cada neutrón, protón, núcleo, está donde no hay otra cosa; en la tierra con
todo lo que hay y cada una está en su espacio de caja vacía. Justo como me decía
mi madre.
Lo que todavía
no le he oído a: Dios, algún Universo, la Tierra o a un átomo, “esto que está
en mí es mío”, tampoco conozco por ningún medio, que hallan usado un posesivo
para nombrarlos: mío, tuyo, nuestro, …..
La mente,
incluso la ciencia reconoce varias: consciente, emocional, colectiva. Quizás la
que no suelen nombrar o reconocer es la Mente Universal, Mente Absoluta o lo
que es más simple “Mente”. La que no es pensante, no puede pensar o producir
pensamiento. La que solamente Es Mente.
Al decir, "Si
no tengo nada en mi mente, en primer lugar no puede ser suya, por lo
tanto no puede tener o poner algo en ella, todo lo que puede ocupar el espacio
de la mente es ella, y como todos sabemos, una mente es como una botella, que por
dentro está vacía para que puedan moverse los pensamientos. ¿qué
debo hacer?", le podría haber contestado perfectamente, que nada, que
se metiera en sus propios asuntos, pero Joshu era demasiado educado para eso y
le dijo que: "Tíra fuera", el concepto equivocado de posesión, de
tener o no tener, de la mente y yo, y que los pensamientos son los pensamientos
y la mente es la mente. ¡Deshazte de la dualidad!, hay que hacer Nada.
Como todavía
le costaba desprenderse de su preciado tesoro, volvió a la carga: “Pero
si no tengo nada, ¿cómo puedo tirarlo?", tengo, no tengo, algo,
nada, pero siempre, yo yo yo yoyoyoyyoyoyo.
"Bueno," dijo Joshu, "entonces
cárgalo, eternamente, vive acarreándolo, hasta que le hagas libre de ser lo que
es y puedas llévarlo
fuera." para poder vivir en
libertad, hasta que finalmente, al vivir en la Libertad Universal, puedas caminar
sin traer ni llevar, siendo Libertad.
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