Si comenzamos
a analizar nuestra vida actual, no ya como sociedad sino a nivel individual, la
mayor parte de lo que encontraríamos sería insatisfacción o “un sí pero…”. Intentando a continuación encontrar las causas, por las cuales
la vida, ha frustrado nuestros sueños.
En esa visión
no somos conscientes, de la gran pérdida de libertad que sería que alguien o algo
fuera el responsable de nuestras circunstancias.
“Si quieres conocer el
pasado, entonces mira tu presente que es el resultado. Si quieres conocer tu
futuro mira tu presente que es la causa”. Buda.
Hemos estado
dando pasos, durante miles de años, sin darnos cuenta o permitirnos mirar, en
la dirección en la que esos pasos iban dirigidos. Había tantos bosques, tantos
animales, tanta agua, tanto aire, que los fuimos usando libremente, con la
libertad que nos había dado la Vida, pero nos olvidamos que Ellas mismas, la
Libertad y la Vida nos hacían responsables de nuestros pasos.
“Todo lo que somos es el
resultado de lo que hemos pensado; está fundado en nuestros pensamientos y está
hecho de nuestros pensamientos y nuestros actuales pensamientos forjan nuestra
vida futura”. Buda.
Está en
nuestras manos, en nuestra libertad, el mirar, el crear el camino, el llegar a
la meta, que un día decidimos tomar como expresión de esa Vida, la de
convertirnos en seres humanos. El camino es simple, somos nosotros, los que
hemos creado, definido, delimitado, cuales son las responsabilidades, el
aspecto, la forma de vida, la sociedad, en la que alguien tiene que vivir para
ser considerado un ser humano. La aceptación de la Vida, de nuestra proposición
de expresión para nosotros, implica que la Vida nos ha dado el aspecto, la
forma y la condición de Seres Humanos. Que ha creado una Tierra para que sea la
casa de la Humanidad.
Por lo que
todo nuestro esfuerzo, nuestra responsabilidad sería: “Ser lo que somos, ejercer de lo que le pedimos ser a la Vida y lo que
la Vida nos ha concedido”. No parece difícil, simplemente tenemos que
aceptar y ejercer nuestra responsabilidad como seres humanos. El sol hace de
sol, las estrellas de estrellas, los árboles de árboles o en grupo de bosque,
el agua donde esté y la forma que tome de agua, el corazón de corazón, los átomos
de átomos y solo falta que nosotros hagamos de humanos.
"Todo lo que somos surge
con nuestros pensamientos. Con nuestros pensamientos construimos el mundo.
Habla o actúa con mente pura y la felicidad te seguirá como tu misma sombra,
inseparable". Buddha - Dhammapada.
Hemos creado
un concepto de vida en el que: la lucha, la pelea, conseguir lo que nos
proponemos, estar por encima de los demás, el poder, la riqueza, cambiar todo,
ser los que controlen la evolución, las plagas, las enfermedades, todo cuanto
suceda en la tierra, es lo importante, hacia donde nuestras vidas, nuestras
metas, nuestro camino, deben estar dirigidas.
Hemos visto a
cada paso, donde nos ha llevado nuestro caminar, hemos intentado cambiar el
camino, construir nuevas reglas, pero olvidamos cambiar las metas al final de
ellas. Independientemente de: la dirección, de nuestras explicaciones, de
nuestras palabras; nuestro final de una manera u otra eran: el poder, la posesión,
y el engrandecimiento de nuestro ego, al situarnos sin importarnos la posición,
siempre que estuviese o creyésemos estar, por encima de los demás.
Nadie se
lleva nada más que lo que es, cuando se va, todos dejamos como herencia, la
sociedad que hemos creado para que vivan nuestros hijos. Ellos vivirán y desarrollarán
los conceptos, los pensamientos y la visión de la vida que les hemos enseñado.
Hemos olvidado, porque nunca puede ser
destruido, el concepto por el que estamos aquí, “Ejercer de Seres Humanos”,
fundar, crear: “Una sociedad humana, que viva en la Tierra”. Para ello
simplemente una cosa nos bastaría de los consejos de Buda: “ Habla o actúa con mente pura y la felicidad
te seguirá como tu misma sombra, inseparable".
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