Son
innumerables las frases de Buda que pueden ser acotadas, porque más que dichas
por Shakyamuni, podrían perfectamente haber sido pronunciada por nuestro propio
Buda, nuestro verdadero Ser, la Naturaleza a la que más que pertenecer es lo que
somos.
“Es fácil ver las faltas de los demás,
pero ¡qué difícil es ver las nuestras propias! Exhibimos las faltas de los
demás como el viento esparce la paja, mientras ocultamos las nuestras como el
jugador tramposo esconde sus dados.” Dhammapada 18:18
Independientemente
hacia el medio o grupo social que miremos, encontramos una crítica desmesurada
hacia lo que hagan, muchas veces sin ser capaces de ver o saber tan siquiera,
qué es lo que se ha hecho, el por qué, ni las circunstancias. Es suficiente
saber que: son de otro grupo social o político, de otra ideología, cultura o
creencias, para que no puedan hacer nada bien y buscamos denodadamente los
detalles, si no encontramos a primera vista los fallos, independientemente de lo
que hagan siempre lo veremos mal hecho. La mayoría de las veces, no pienso que
ocultemos nuestras faltas, sino que no estamos atentos o conscientes de lo que
hacemos, nuestras vidas dependen de las criticas que hacemos de las vidas de
los demás.
Por supuesto
hay una ocultación, búsqueda de exculpaciones, incredulidad y negación, de lo
que hacen los de nuestra ideología, que siempre intentamos justificar y negar
sus faltas.
"Más grande que la conquista en
batalla de mil veces mil hombres es la conquista de uno mismo". Buda. Dhammapada
(v103)
En nuestra
lucha por demostrar nuestra inocencia, tratamos de estar por encima de los
demás, que es la prueba de que tenemos la razón, porque la batalla para
demostrar nuestro amor y satisfacción con lo que somos, no hemos llegado ni al
punto de plantearla.
"La máxima victoria es la que se
gana sobre uno mismo" Buda
Es una cuestión de
madurez, de evolución, en la que tras intentar infructuosamente
encontrar la felicidad, situándonos por encima de los demás, vendiendo nuestras
almas, para obtener palabras de afecto o alabanza, que nos reafirmen en
nuestras vidas, por primera vez comenzamos a ser conscientes, de que somos
nosotros mismos, los que debemos amarnos y respetarnos. Este es el comienzo,
para encontrar nuestra naturaleza de ser amor, cuando por primera vez somos
conscientes de que antes que nada somos Vida, cuando la batalla con el enemigo
real, el ego, comienza.
“No es más rico quien más tiene, sino
quien menos necesita”. Buda.
Cuando has
presentado batalla al ego, todo lo demás va haciéndose innecesario, puedes
disfrutar de lo que eres y lo que tienes, no tienes nada que demostrar, no
esperas recompensas, no actúas por los resultados o lo que podrás obtener.
Vives para ser lo que eres, ser responsable de tu vida y sus circunstancias,
para amarte en toda la extensión de lo que eres, vives para Ser Vida, no
teniendo nada, no necesitando nada, has perdido la posibilidad de ser rico o
pobre, porque simplemente Eres, sin necesidad de saber qué, sabiendo que eres
tú.
“Para enseñar a los demás, primero has
de hacer tú algo muy duro: has de enderezarte a ti mismo”. Buda.
Todos somos
Buda, encontrar ese Ser, esa Naturaleza, no depende de confrontaciones, luchas
o demostraciones a los demás, solamente cuando dejamos ir todo lo que nos ata,
todo deseo, toda discriminación, toda diferenciación y comparación, cuando nuestro yo abarca realmente todo, cuando nos quitamos todo lo superfluo,
solamente queda aquello que realmente somos, Buda.
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