A lo largo de
nuestra historia hemos vivido en guerras, que han tratado de hacernos libres,
en guerras que han tratado de esclavizarnos, porque no puede haber una lucha
por conseguir algo, que no este en su alma la dualidad. Los dos aspectos de los
deseos que se quieren conseguir en la pelea, en la imposición de algo.
Para conseguir
nuestra libertad hemos esclavizado a los vencidos, para establecer nuestras
creencias filosóficas o religiosas, hemos tratado de destruir las otras. Incluso
tratamos de imponer la democracia a pueblos y civilizaciones que nunca han
tenido los problemas que conlleva la democracia, que siempre vivieron en
libertad y sin lo problemas que queremos arreglarles.
Cuanto más
elevada es la verborrea de los derechos y libertades que queremos imponer,
mayor es el daño, el destrozo, la esclavitud o falta de derechos que hay que imponerles
a otros.
El conflicto
no es, el de que lo que deseamos sea incorrecto, que la libertad o los derechos
sean algo malo, el conflicto nace de nuestra ignorancia de: la naturaleza,
realidad y lo que el concepto que deseamos significa. No porque las palabras o
conceptos tengan un significado en sí mismos, sino porque es el que les hemos
dado nosotros, los creadores de los conceptos.
La Libertad
es algo consustancial con la Vida, está en su Naturaleza, no es algo que se
pueda imponer, no se puede conseguir, no es algo por lo que halla que pelear. La
Libertad está en nuestro Ser, simplemente por ser Vida, lo único que hay que
hacer es manifestarla, porque eso es lo que verdaderamente puede expresar a la
Vida en nuestro vivir.
Pero vivimos
para encontrar la libertad, queremos vivir en ella. Me pregunto: ¿Cómo podríamos
vivir en Libertad, si es lo que somos?, podemos manifestarla en nuestra forma
de vivir, pero nunca vivir en ella; podemos manifestarla cuando vivimos o no
vivir cuando no es manifestada. Lo tenemos tan claro, que nuestras expresiones
en cualquier tipo de esclavitud nuestras palabras son: “No puedo respirar,
estoy en un sinvivir”. Pero seguimos
tratando de encontrarla, de imponerla, de conseguirla por medio del único
camino que la destruye: “La imposición o
la pelea”.
Es por ello
que en la Vida nunca se manifiesta la violencia, solamente la agresividad, la
defensa, de la Individualidad. Una Individualidad no discriminativa, en la que
no existe el “yo”, en la que no existe la guerra o la imposición. Se defiende
la Individualidad de la Nada, en todas sus manifestaciones, que componen
Eternamente un Todo, independientemente de por donde es cortado.
No hay
culturas confrontadas, no hay religiones opuestas porque todas son verdaderas,
incluida la del ateísmo. No hay naciones, porque todas las divisiones son
individualidades absolutas, cada individuo, cada célula o átomo, es una nación, un universo en si mismo. Pero la Libertad nace de que en la interrelación,
siempre existe una sola individualidad, donde no es posible la confrontación,
porque la aceptación y entrega a la Libertad es tan absoluta que no hay
percepción de otro o de la más mínima separación.
Pero hay que
defender esta libertad, porque nuestra vida solamente puede existir y vivir, en
la Libertad.
La Libertad, no es algo que podemos imponer para crear una vida o sociedad mejor, porque
funcionará con nuestras ideas. Vemos en todas partes, grupos que quieren
imponernos su libertad: En Sudamérica, África, Asia, los cárteles, los grupos
de izquierdas y extrema derecha, que nos obligan a hacer sus deseos y vivir
bajo sus órdenes, los gobiernos que imponen sus ideologías. En Europa y la América
del Norte, los políticos, los grupos de poder, con sus ideologías y forma de
imponer sus reglas y formas de bienestar, nos dicen que eso es la libertad.
Es el pueblo
el que debe de saber qué es realmente la Libertad, porque nadie que quiere
imponer algo, sabe lo que es. La Libertad, no diferencia entre bueno y malo,
por lo que no puede imponer nada, solamente: respeto, aceptación y entrega, es lo único que permite vivir realmente, la Libertad.
Podemos perder
la vida física, y seguir existiendo en la Libertad. Podemos huir, por miedo a
perder la vida física, por miedo a perder nuestra Libertad, pero con ello
solamente encontraremos que no podemos respirar, que no vivimos, porque nadie
puede traernos, darnos, crearnos, o hacer que vivamos en la Libertad de la
Vida, porque eso lo tenemos que manifestar nosotros.
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