No pretendo molestaros

Al parecer, algunas personas se sienten ofendidas porque no las agrego a mi foro. No tengo, ni pertenezco a ninguno, simplemente escribo y lo publico en abierto, para que libremente pueda ser leído o comentado por las personas que lo deseen. Suelo comentar las páginas que me lo permiten y les parezca bien, de las personas que me añaden a su foro. Suele ser lo que siento al ver lo que han publicado, intentando dar una visión diferente, desde la que ha sido escrito. Lo que os agradezco.

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Yui Shin

lunes, 7 de diciembre de 2015

CUANDO LEEMOS

         
Leía ayer en la página de América, este post, y por supuesto leí la frase de Haruki Murakami. No sabía quien era, tampoco es una cosa que me importase, he mirado y es un escritor, del que he leído una frase: “Si sólo lees libros que todos leen, sólo puedes pensar lo que todos están pensando”.
          Probablemente muchas personas han visto el post, no solamente en esta página, sino que han visto la frase en más lugares, incluso en algún libro. No puedo estar más en desacuerdo con ella de lo que estoy, probablemente porque la he leído, no solamente la he visto, no me he quedado con lo que halla querido decir “Murakami san”, sino que Yuishin ha leído lo escrito.
          Si plantamos un bosque con el mismo tipo de semillas, con un mismo terreno y unas condiciones de una misma zona, en cuanto comiencen a crecer, unas cambiarán las condiciones de las otras, por lo que tendrán que crecer diferente. Si estás en un extremo, las inclemencias y las condiciones no serán las mismas a si tu situación es en el centro o en otro extremo diferente. Por lo que tu crecimiento a veces no puede ser ni parecido. Si eres una semilla de otra planta, solamente en condiciones diferentes crecerás igual que otra.
          Todos vivimos una sola vida, pensando y llegando a conclusiones diferentes, cuando realmente vivimos, cuando realmente escuchamos o leemos las palabras, nuestra interpretación, nuestra conclusión, nuestro aprendizaje no puede ser el mismo que el de otra persona, por muy igual que parezcamos o por muy similares que sean nuestras vidas.
          Pero hay que leer, hay que vivir, porque no se trata de entender lo que nos dicen, o seguir a quien lo escribe, o a quien nos explica lo que debemos entender o pensar, acerca de algo que tenemos que vivir y leer nosotros, porque esa es nuestra responsabilidad.
          A lo largo de los años, he explicado a personas que se sentían culpables por las que estaban a su alrededor, hijos, padres, amigos, hermanos, de las decisiones que estos habían tomado, preguntándose  atormentados qué habían hecho mal para que esas personas hubiesen tomado el camino que llevaban, que hubiesen entendido esa visión de odio hacia sus propias vidas y odio y desprecio por la vida que les rodea.
          Todos tenemos parte de la responsabilidad, de la convivencia social, pero es el entendimiento individual el que nos lleva al vivir como vivimos, porque es nuestra responsabilidad individual, el entendimiento. Por ello lo que siempre les he dicho es que incluso desde una educación equivocada, tenemos la libertad de entender lo correcto. Que si hablamos y actuamos desde el amor, lo único que no podemos controlar es el entendimiento de la otra persona. Que si deseamos tener dos hijos con personalidades o entendimientos parecidos, la educación y el trato deben de ser diferentes, porque al educar u ofrecer unas condiciones o trato similares a dos personas diferentes, lo natural es que aprendan, entiendan y reaccionen de forma diferente.
          No son los libros, ni la educación, ni los demás, los responsables de nuestro entendimiento, de nuestras decisiones, de las acciones que realizamos y de las que hacemos responsables a Dios, la Vida o los demás.
          Ser terrorista leyendo el Corán, la Biblia o algo escrito por un filósofo o escritor, no es por lo escrito, es cuando no leemos, sino que aceptamos el entendimiento de un pastor. No son nuestras vivencias las que nos llevan al odio, sino el no aceptarlas y no vivirlas, o entenderlas desde las explicaciones literales de otras personas.
          No es el leer lo mismo, lo que nos lleva a ser iguales o tener unas mismas opiniones. No es que haya muchos libros lo que nos hace diferentes. Es el no leerlos realmente, el no vivir lo que leemos, el no aceptar nuestra opinión, lo que nos lleva a seguir el entendimiento general o de otra persona cuando miramos lo escrito, pero no el leerlo.
          Si solamente hubiese un libro, si solamente hubiese una frase, si solamente hubiese una sílaba o letra, en ella está Toda la Vida, si la leemos y la comprendemos, tendremos la comprensión de la Vida, pero percibida desde un lugar que solamente nosotros podemos ocupar. Pero si Leemos Realmente, seremos el Libro, seremos la Silaba, seremos, Seremos.
Nada que leer, nada que entender, cuando Somos Leyendo.


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