LAS RAZONES NACIONALISTAS

          Las cosas de los demócratas, me tienen intrigado. Confieso mi ignorancia, pero me siento sorprendido, del entendimiento democrático de los políticos independentistas catalanes.

          Prohibido anunciar o poner el nombre de tu comercio en castellano, en una autonomía española. Si te atreves a hacerlo, multa y problemas, si necesitas ayudas o subvenciones más problemas.

          Si vas de otra zona de España, o quieres que tus hijos estudien en español, puede ser porque es un idioma más usado que el catalán, porque a lo mejor por motivos de trabajo piensas que te podrías cambiar de zona geográfica en España, porque es lo que piensas, o por razones que son personales y la ley te ampara para solicitarlo, denegado.

          La libertad de expresión, la posibilidad de elegir: Ninguna, si no es aceptando las consecuencias, ser ridiculizado, persecución, retirada de privilegios y ser señalado como español.

          Puedes ser agredido por llevar una bandera española, me gustaría ver a alguien quemando la llamada bandera de los que  no aceptan las leyes que no les gustan, sobre todo su talante democrático, probablemente dejándoles el mechero, pues generalmente los españoles no llevan mecheros de quemar las creencias de los demás.

          Sus planteamientos son que ellos no tienen que seguir las leyes, que las únicas obligatorias para todos son las suyas. Que democracia es que los demás hagan lo que ellos dictan, que tus hijos sean adoctrinados, que si quieres oír una emisora o ver un programa de televisión, en el que te den visiones diferentes para opinar, tienes que captar emisoras de fuera de Cataluña y ponerlas bajito para que no puedan llamarte español.

          Escuchando sus planteamientos para no cumplir las leyes, me parece el mismo argumento que un pederasta que quiere legalizar sus actividades, acusando, de que debido a la edad  del juez, es casi impotente y que por eso tiene miedo de darle libertad a él para legalizarlo.

          En realidad como cualquier gente que incumple las leyes, tienen argumentaciones parecidas a cualquier: mafioso, terrorista o contemplador de su propio ombligo.

          Lo que sí me cuesta trabajo entender, es que llamen democracia a sus ideas totalitarias y de fuera de la ley.

          En el colegio había matones que me decían lo mismo, si quieres vivir bien tienes que hacer lo que te diga, es mi democracia. Me costó que me pegaran, pero no que hiciera lo que quienes van fuera de las leyes de convivencia, querían imponerme.

          La enseñanza de adoctrinamiento en los colegios catalanes, al menos la que vi el otro día en televisión, me pareció vergonzosa. Es frecuente el adoctrinamiento en la enseñanza, podemos verlo en que cualquier inútil, lleno de odio, sin capacidad para pensar, puede adoctrinar a la gente convirtiéndolos en: “Terroristas, asesinos, mafiosos, drogadictos, traficantes, o cualquier inmundicia social, incapaces de pensar por sí mismos”. O llevarlos a mirarse el ombligo, haciéndolos nacionalistas, que excluyen a los demás, si no es para beneficiarse.

          En una sociedad que debería buscar la humanización. Desechando los nacionalismos y las diferenciaciones, les enseñan a mirar su grupúsculo diferenciado, aislándolos y llevándoles a pensar en las separaciones, en la tribu.

          ¿Serían tan demócratas, que si los vecinos del barrio de Gracia, o las Ramblas, al ser procedentes de otras zonas de España, votasen para pertenecer a Andalucía por ejemplo, lo permitirían?

 Sacado de Internet.              Rafael Casanova no murió en los combates, por lo que, evidentemente, no fue ningún mártir. El día 11 había sido herido en un muslo por una bala cuando ascendió a las murallas con la bandera de la patrona de Barcelona, Santa Eulalia, para enardecer a los defensores. Antes de la entrada de los felipistas, Casanova delegó la rendición en otro consejero, incendió los archivos que lo involucraban y se hizo pasar por muerto mediante la falsificación del acta de defunción de un cadáver. Disfrazado de fraile (Qué valor), huyó a esconderse en la finca que su hijo tenía en la población de San Baudilio de Llobregat. En 1719 recibió el perdón Real y todos sus bienes incautados le fueron devueltos. Ejerció sin problemas la abogacía en dicha población hasta su retiro, en 1737.

El 2 de mayo de 1743, falleció a la edad de 83 años. Su entierro fue oficiado al día siguiente, el 3, que es tomado erróneamente por muchas fuentes como el de su muerte.

               ¿Qué pasaría si alguien de derechas quemase su foto públicamente?