Dicen que todo es posible,
Pero nunca lo he creído,
Que pudiendo hacer todo,
No puede hacerse,
Lo que está concluido.
Para caminar cien años,
Un paso, un año,
99 pasos; un paso, un mes,
Una semana, un día, una hora,
Sin haberte movido de ahora,
Menos de un paso,
Cien años has caminado.
Nadie si no camina, llega lejos,
Nadie llega faltándole un paso,
A veces,
nuestra desesperanza, nuestra convicción es: “que
nunca lograremos alcanzar lo que deseamos. Nunca lograremos ser como deseamos. Nunca
la Vida será como la soñamos”.
Estamos
mirando el paso siguiente, la mayoría de las veces demasiados pasos adelante.
Pero no hay
nada que deseemos que no podamos lograr, nada y digo ¡¡Nada!! de lo que
deseemos es imposible de alcanzar.
Pero aquello
de donde hemos partido, no tiene retorno, no es posible alcanzar el deseo de
retroceder a un paso que ya dimos. Vivir en un lugar o situación pasada, tiene
que ser, viviéndolo por primera vez.
Lo alcanzado,
tenemos que dejarlo morir como deseo. Dando pasos de un metro, cada hora, nos
llevará a recorrer 24 metros en un día. Pero no habremos conseguido nada si
caminamos 23 horas y 59 minutos. Porque es el último paso el que destruirá el
deseo, al hacerlo realidad.
Hay que
vivir cada instante de nuestra infancia para llegar a la niñez, para llegar a
la pubertad, hay que haber continuado, daremos un último paso cada vez que
lleguemos a un nuevo Aquí, donde existe nuestra realidad.
Quien camina
hacia delante, no debería necesitar sueños o deseos, porque caminando paso a
paso, siempre está llegando a donde está, donde existe, donde está manifestando
la Vida que Es.
Solamente desear estar un paso adelante, nos
crea angustia, dolor, insatisfacción, pocos deseos de vivir al no alcanzar
nunca nuestra meta.
Porque solamente se puede desear: “Lo que no tenemos, lo que no somos, estar donde no
estamos, la irrealidad”, por eso se llama
deseo.
Si caminamos un paso cada vez, todo resulta
fácil, todo es posible, para quien camina sin desesperación hasta dar el último
paso, hasta llegar al lugar de donde nunca se ha movido: “Aquí”. Para vivir en el
tiempo donde se manifiesta lo que está siendo: “Ahora”.
Siendo lo que eres, no hay meta inalcanzable, por imposible que parezca, por
lejana que la veamos, solamente está a un solo paso.
“Todas las semillas, florecerán en su momento”
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