Leía el
otro día, que Chávez quería armar a los piquetes o grupos que le apoyan, para
controlar las manifestaciones de los opositores. Dijeron que había amañado las
elecciones y que si las hay de nuevo, podría amañarlas para seguir mandando o
no respetaría el resultado. Se dice también, que tiene cuentas junto con amigos
y familiares en el extranjero.
Al parecer
y por los documentos encontrados de Alcalá-Zamora, los que le aconsejan siguen
los pasos dados en la instauración y finalización de la República Española. Regalar
el oro y las cajas privadas del Banco de España, a sus amigos rusos, amañar el
resultado de las elecciones y armar a los milicianos, para acabar con otros
pensamientos y la iglesia y sus valores.
Tenemos también
al socialismo moderno, pues de los que están a su izquierda, es mejor no
mencionarlos, más cerca de los herederos de los asesinos y de los
independentistas, de los ocupas, los que no trabajan y los antisistema, que de
los que cumplen con las leyes, tratan de trabajar o trabajan y buscan
soluciones en lugar de follones. Eso sí, donde mandan, solamente cobran
impuestos para subvencionar a sus seguidores y crean pocos puestos de trabajo.
El socialismo
pide la exclusión, la marginación, la desaparición de la derecha, para lo que
la obliga a pactar para gobernar, a quien lo menos que pide es el culo de los
españoles. Pues no hay más petición que Más, Más, dar menos, hacer lo que les dé
la gana, incumplir leyes, entregarles el dinero del resto de los españoles,
dejar entrar a ETA en las instituciones, acercamiento de los asesinos
encarcelados y en general: “Que nos bajemos
los pantalones o subamos la falda a los ciudadanos del resto de España.
Cuánto más
fácil, mejor en sus resultados para los ciudadanos, facilidad para gobernar,
control de la corrupción propia y ajena, sería si simplemente gobernase el que
gana, controlado y corregido en sus leyes por el partido opositor, que podría
corregir parte de los errores que siempre tendrá si alguien piensa solamente
por sí mismo, sin escuchar a los demás.
Los socialistas
modernos presumen de su capacidad de diálogo o pacto, de su odio a la derecha y
que son los únicos que pueden gobernar. Probablemente es lo que necesitamos los
españoles, una izquierda terca e inútil, pero pienso que es el socialismo, los
militantes, los seguidores, los que piensan que socialismo es lo mejor para la
sociedad, el PSOE y demás partidos socialistas, los que deberían expulsar a
toda esta panda de vagos, inútiles, de mentes cerradas, sin inteligencia y
viviendo solamente en la burbuja de su ego, sin ver que hay alguien más, que
hay ciudadanos que esperan que al menos tengan la capacidad de pensar, para que
arreglen los problemas de España, en la oposición o en el gobierno, pero usando
las dos manos, ayudando la una a la otra.
Todavía no
he escuchado en la política española, que la derecha quiera destruir, anular o
expulsar a la izquierda. Eso sucedió tras una guerra, en la que la izquierda,
si hay algo de verdad en esos documentos recuperados del archivo del expresidentes
de la República Española, D. Aniceto Alcalá-Zamora, debería haberse ido sin
necesidad de la guerra, y estar ahora pidiendo perdón, por haber regalado el oro
de los españoles a sus amantes los rusos, haber trampeado las elecciones y usar
a los ciudadanos para que peleasen unos con otros.
Lo que me
hace sentirme preocupado es que estén exportando estos métodos a Venezuela,
para que la izquierda siga mandando en completa democracia y progreso. No
importa que no coman, mientras puedan vivir en la libertad que Maduro les diga.
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