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(45) El Tao que puede ser nombrado no es el Tao eterno. El nombre que
puede ser pronunciado no es el nombre eterno. Lo Innombrable es el principio
del Cielo y la Tierra. Lo Nombrable es la madre de las Diez Mil Cosas. Sin
deseos se puede ver el Misterio; Con deseos se puede ver sus manifestaciones.
Los dos brotan de la misma fuente, pero tienen diferentes nombres para una
misma realidad.
Oscuridad dentro de la oscuridad, Profundo misterio, Puerta de la
transformación de todos los seres.
2 (46) Bajo el cielo, cuando algo se concibe como bello, aparece lo feo.
Cuando todos reconocen algo como bueno, surge lo malo. Por lo tanto, ser y
no-ser se engendran uno al otro, Tener y no tener se originan juntos, Difícil y
fácil se producen mutuamente, Largo y corto se contrastan uno al otro, Alto y
bajo se apoyan uno al otro, Palabra y sentido se armonizan uno al otro,
Adelante y atrás se siguen uno al otro. Esta es la ley de la naturaleza.
Por eso el
sabio va de un lado al otro sin hacer nada, enseñando sin hablar.
Las Diez Mil Cosas se elevan y caen sin cesar. Pero él crea, sin
buscar posesión;Trabaja, sin esperar reconocimiento; Hecho el trabajo, pronto
lo olvida. Porque no lo reclama, Su mérito perdura para siempre.
En los dos
primeros aforismos del Tao Te King, nos define la esencia del Todo y define la
dualidad. El Tao comienza antes del principio, y está formado, creado por todo
cuanto se manifiesta, cualquier punto del Tao es principio y final,
independientemente de que exista o no manifestación. Lo Absoluto no puede ser
nombrado, lo Nombrable pertenece a la dualidad y es la manifestación tal cómo
es percibida. Si no hay deseo debido a la aceptación, se vive en la dualidad
pero de acuerdo al Tao, cuando hay deseo, se vive de acuerdo a nuestra mente
individual y separada, por lo que al contemplar la diversidad, surge el deseo.
Es por medio de esta dualidad en que el Tao es percibido. Esta percepción, al
ser dependiente de nuestra individualidad es llamada Irrealidad, mientras la
Aceptación de las cosas como son, sin interrogación o deseo, es llamada
Realidad, siendo la Realidad Suprema la Seidad, el Tao Innombrable, por no
haber algo que pueda percibirlo.
Decía un
Maestro Zen que: “La mente no es Buda”. Los conceptos no son la Realidad, “La razón no es el Camino”. No podemos entrar en esa Realidad por medio
del entendimiento de los conceptos, que tratando de explicar lo que nos rodea,
lo que percibimos ser o nuestra relación con ese Todo, hemos creado. La
ciencia, las filosofías, las religiones, pueden tratar de explicar y definir
nuestra relación para llegar a esa integración, pero ésta nunca se ha
interrumpido, solamente ocurre en nuestra mente, que solamente razona con los
datos que le aportamos, por lo que nunca puede penetrar en la realidad de las cosas, pues analiza solamente lo que
percibimos.
Hemos
creado conceptos, que se refieren a cosas que viven en la Eternidad como: Dios,
la Vida, el Amor, pero debemos recordar, que en las filosofías antiguas los Inmortales
tenían que luchar hasta que solamente uno existía, el Tao, lo Absoluto,
Indiscriminado, Imperceptible, Innombrable, nosotros le llamamos Tao, o
Absoluto, pero el propio concepto de Absoluto, hace que no pueda haber otra
existencia que le perciba, por eso se le llamó a ese concepto Vacío, que no es
que no haya algo, sino que no puede ser percibido.
Pienso que
los dos conceptos básicos que debemos de manifestar y vivir con ellos, son
estos dos primeros conceptos del Tao: Absoluto y Dualidad, pues todos los
conceptos de inmortalidad, perderán su cabeza hasta que vuelvan a ser Uno y de
aquí al Absoluto.
Somos: Dios, Vida,
Amor, Humanidad, Religión, Universo, todo lo que es Inmortal es lo que somos
ahora, pero son simplemente creaciones de la mente, la razón, por lo que
tendrán que dejar de manifestarse, porque son el origen del ego, de la
separación, porque nuestra realidad es Ser Absoluto.
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