No pretendo molestaros

Al parecer, algunas personas se sienten ofendidas porque no las agrego a mi foro. No tengo, ni pertenezco a ninguno, simplemente escribo y lo publico en abierto, para que libremente pueda ser leído o comentado por las personas que lo deseen. Suelo comentar las páginas que me lo permiten y les parezca bien, de las personas que me añaden a su foro. Suele ser lo que siento al ver lo que han publicado, intentando dar una visión diferente, desde la que ha sido escrito. Lo que os agradezco.

Si tenéis que pagar para entrar en la página, no es la original. Como digo a la derecha es Gratuita y sin publicidad.
Yui Shin

sábado, 20 de enero de 2018

EL VIAJE DE LA DIGNIDAD

          Es curioso, que si miramos desde cuándo podemos leer lo que es la Dignidad, podemos remontarnos miles de años.
          Que probablemente, la búsqueda de la Dignidad comienza antes incluso de que la Vida crease un hombre físico, con cuerpo y piernas que le permitiesen viajar en su búsqueda.
          Pero al igual que en Castilla y León, es desterrada fuera de sus tierras con Rodrigo y los Comuneros. No permitiéndole regresar a convivir con los Dolfos, Bellido. En el resto de las sociedades, camina hacia el olvido, hacia ser algo mitológico e irreal.
          Vemos los Samurais, donde es el honor y la dignidad lo importante. Dispuestos a perder la vida y la hacienda antes de faltar a la dignidad. Dando paso a los Ninjas que lo importante es el resultado.
          Los Caballeros, que defendían el honor del débil, al pueblo al necesitado. Sustituidos por los palaciegos, de las fiestas y explotación del pueblo.
          Los países que se hicieron grandes, al destruir a todos los aborígenes, al llevar su forma de vivir y su ambición, muchas veces, no solamente la de los poderosos, sino las del pueblo, que fue capaz de destruir lo que había para apoderarse de ello.
          Vemos islas donde los que consiguieron el poder fueron los esclavos, sumidas en la misma sociedad que hay en África su hogar de origen.
          A veces, miramos como héroes a los que a traición arreglan otra traición. Pensando que unas traiciones son dignas y otras no, al más puro estilo Ninja, en el que lo que importa es el resultado, el beneficio que hemos conseguido o si hemos ganado algo.
          No importa dónde miremos, el tipo de sociedad que analicemos, las libertades que encontremos en una civilización o en otra, no es posible encontrar una en la que no encontremos el callar, el no hablar, la falta de voz del pueblo y la imposición del poder.
          Pueblos que han pagado impuestos hasta vivir en la miseria, pueblos que han construido los grandes monumentos de la civilización para gloria de algún poderoso, pueblos que han ido a las guerras o han enviado a sus hijos por la ambición de un poderoso o alguien que deseaba serlo.
          Pueblo, que ha conseguido el poder y ha pisoteado al pueblo que no lo tiene, pueblo, que traiciona o roba a su pueblo, en nombre o por congraciarse con el poder. Pueblo, que se vende al poder para poder robar o vivir mejor que sus conciudadanos.
          Pueblo, que sigue a un ambicioso, para ganar su libertad de ser esclavos de quienes los lideran.
          Creemos, que la dignidad del pueblo callado es luchar por tener la libertad de hablar. Para poder repetir lo que dicen los nuevos líderes.
          Creemos, que destruir los poderes, liderados por nuevos ambiciosos que todavía no han conseguido el poder, nos hará libres, nos llevará a conocer la dignidad, pero no es cambiar de pastor lo que le da libertad al rebaño.
          Dignidad es poder hablar y escuchar el silencio, porque solamente cuando hay indignidad hay que hablar para denunciarla.
          Creemos que la dignidad, está en tener un pastor justo, pero está en compartir las responsabilidades, aportando lo mejor de cada uno.
          Hemos olvidado las semillas que nos han construido la sociedad que tenemos: “Traiciones palaciegas, un pueblo no en silencio sino callado, destrucción de lo de los demás para imponer lo nuestro, que en general, ha sido un pueblo imponiendo a otro las ambiciones de sus amos, hoy en día seguimos queriendo imponer la dignidad con nuevas leyes, que corrijan nuestra falta de ella”, pero la semilla de algo, sabemos lo que produce.
          La Dignidad no viaja, no se mueve, no se puede encontrar, no se puede crear.
          Dignidad es la Vida, el Amor, Dios, y tiene que vivir en cada uno de nosotros, para que nazca la Justicia sin leyes, el Poder sin vasallos o poderosos, el Pueblo sin otros pueblos.
          Tanto nos han hablado de la Dignidad, que hemos dejado de escuchar hasta ignorar su nombre, su existencia.
          Una sociedad donde solamente importa lo que conseguimos, ese espíritu Ninja, no puede existir sin el Espíritu Samurai, que le de honor, valores, y la dignidad a lo que deseamos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario