LLEGÓ EL MESÍAS

          El mensaje principal: “Maná y champán para todos, leyes para haceros a todos buenos, diálogo con todos mis palmeros, felicidad, trabajo, comida, educación a medida y dirigidas por ley, sanidad y concesión por ley a cuanto pida cada uno, vivienda, subvenciones y una lámpara de Aladino para cada uno de sus palmeros y amigos”, bueno, se me acaba la memoria y en ningún momento he oído cómo se va a pagar nada de eso, probablemente el gobierno renunciará a su sueldo, para ello.

          Ha prometido que se permitirá el asesinato libre de fetos y que se pagará a las que no puedan tener fetos que asesinar, la fecundación in vitro o asistida.

          Que se recuperarán el patrimonio robado o conseguido por abuso de poder, señalando el Pazo de Meirás, pero se ha olvidado del oro de los españoles robado por sus amigos. Ha prometido recuperar la Memoria Histórica de lo que hicieron los demás o la derecha, pero ha olvidado los asesinatos, abusos y tropelías realizados por sus correligionarios, las izquierdas.

          Ha prometido que intentará impedir las “fake news”, menos mal que sabemos que no lo hará, porque entonces tendría que dejar de hablar.

          Lo que sí ha quedado claro a pesar de no decirlo explícitamente, es que no permitirá otro Mesías, que destruirá o arrinconará a cualquiera que no se plegue a sus leyes. Sea este Mesías religioso o político, no permitirá que pueda manifestarse, porque la libertad de la que habla es, la de decir por ley lo que podemos: Pensar, decir, hablar, o escribir.

          No me asusta, ni preocupa, Sánchez, ni Iglesias. Pero siento vergüenza: del rebaño, de los palmeros, de los aprovechados, de los cobradores, de los extorsionadores, de los abusadores, de un Inútil, de un ambicioso, de alguien que sin Dignidad es capaz de vender su alma por el poder. Porque son los que otorgan con su silencio, o con su complicidad, los culpables de ser gobernados, por quienes no deberían ni administrar su hogar, si tienen familia con ellos.

          Es difícil escuchar, que nuestras peticiones serán cumplidas, cuando pedimos día y noche, respeto y libertad para insultar, y tantas cosas opuestas e imposibles de armonizar, que habría que ser gilipollas para creer, que quien ha prometido lo imposible sabe lo que habla o piensa cumplirlo.

          Se crearán leyes para obligarnos a hacer sólo aquello que se nos ordene, y tendremos un Poder Judicial Progresista, que firmará las Sentencias que les sean dadas por el gobierno.

          La igualdad será, que sus palmeros podrán hacer lo que les dé la gana, protegidos no por las leyes o la Justicia, pero sí por los Jueces y Fiscales.

          La igualdad de los españoles, estará determinada, por la fidelidad a sus caprichos o protección a que siga en el poder.

          Ha dicho más cosas, pero no soy un Profeta y por tanto soy incapaz de entender y recordar lo que dice el Mesías. Manifiesto mi incapacidad para entender y poder defender lo que promete un Mesías, menos aún cuando este es un Inútil, porque podría entender a un Mesías Político, si es que tan siquiera, hubiese un solo político en la política europea.

          Me temo más, el renacimiento de la Inquisición, que la hermandad y humanidad profetizada cuando nace un Mesías.

          Me temo también que, el Maná estará fabricado con los despojos de los borregos sacrificados y el champán con las lágrimas de nuestra desesperación.

          Dios no repartirá suerte, hace tiempo que nos dio el Libre Albedrío y la Libertad de crearla. Porque no es suerte lo que trae la felicidad, sino el sentido común y el esfuerzo por el respeto y la responsabilidad.