Los
Maestros, preguntan acerca, de cuál de ellos es real. Nos recuerdan que en el
ahora, la realidad puede ser cualquiera de las dos, indistintamente.
Despertar en
una de las dos realidades, significa ser trasladado a la otra, por lo que hay
que salir de una realidad del soñador, para entrar en su sueño.
He escuchado
tantas veces, que mi sueño es tan irreal, tan utópico, tan imposible, que me
pregunto cómo puedo permanecer dormido toda una vida.
Cómo es
posible, que ese mundo en el que vivamos en paz y felicidad, en el que seamos
seres humanos, sea simplemente un sueño del que todos quieren despertarme.
A veces
cuando despierto, cuando miro a cuantos desean despertarme, les veo en mi
sueño.
Es entonces
cuando dudo acerca de mi realidad: Soy el que vive en el mundo que todos
sueñan, o acaso la realidad, es ese mundo del que todos queremos que solamente
sea un sueño.
Es entonces, cuando deseo que todos durmamos, para vivir en el sueño, esa locura de sueño o
pesadilla, llamada Humanidad.
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