La mayoría de las veces, hemos
encontrado alguien que nos amase, pero: ¿Qué necesidad tenemos de
comprometernos y amar, si ya nos dan cuanto deseamos?, lo que ha llevado a que
no sepamos amar por dos razones, una porque necesitamos ser amados antes de
amar nosotros, la otra porque si la persona que nos ama nos da cuanto deseamos
y libertad para seguir buscando, qué necesidad tenemos de amar y estar
pendientes de esa o esas personas.
Y es que hemos pasado nuestro caminar
en la Tierra al menos, para encontrar el amor, el amor de ser amados. Pues sólo
entonces en la seguridad de que estamos pagando o intercambiando por lo que
recibimos, nos atrevemos a mostrar amor hacia esas personas que nos aman.
Desconozco el motivo, por el cuál
desde mi juventud, me costó tanto decirle a alguien que buscaba ese amor, que
la amaba. Una época que decir que la amabas y erais novios, era el pago por sus
favores.
He podido decírselo a personas que
simplemente eran amigas, que el amor que decías era solamente amor, sin más
compromiso que respetar y ayudar cuando fuese necesario. Algo para lo que no he
necesitado amar o que me digan que me aman.
He tenido amigas durante años, que
insistían si las amaba o si éramos novios, mi respuesta siempre fue que éramos
amigos. Saliendo cada fin de semana, viéndonos cuando podíamos, pero más que
buscar el amor de ser amado, mi búsqueda fue la de encontrar “al Amor mismo”.
He sido traicionado, engañado y tenido falsas relaciones, en las que no fueron
sinceros o sinceras.
Pero como le dije a alguien hace
muchos años, cuando me preguntó si alguien era mi amigo, al decirle que sí, me
relató lo que esa persona decía de mí, algo que nunca he sabido si era verdad.
Mi respuesta: “Me has preguntado si es mi amigo, pero si quieres saber si yo
soy su amigo, le tendrás que preguntar a esa persona”.
He conocido y me he relacionado con
muchas personas y más que lo que esas personas sintiesen o sientan por mí, me
importa lo que yo recuerdo y conservo en mi ser de ellas.
Personas con las que he estado una o
pocas semanas, permanecen en mi recuerdo, en mi corazón, por lo que yo sentí al
estar con ellas, no por lo que yo sé que ellas sintiesen por mí.
Y es que encontrar el amor, puede ser
suficiente ser amado. Pero al encontrar al Amor, sólo sirve el amor que hay en
nosotros mismos.
Hay dos cosas que no podemos pedir a
los demás: Amor y Dignidad, sólo podemos contar con la que damos nosotros
mismos, eso es encontrar realmente algo, lo demás es pedir a los demás algo
para rellenar lo que no tenemos.
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