Toda una existencia buscando, porque
no somos capaces de aceptar y de reconocer nuestra otra mitad. Lo que conlleva
una consecuencia ineludible: No sabemos de lo que somos Mitad.
Hay una mitad Eterna, que no somos
nosotros. Hay un algo que llena Todo, pero que no está Vacío, sólo que no puede
ocuparlo otra cosa. Hay quien explica el nacimiento del Universo, porque hay algo
Eterno que se ha transformado en algo temporal que siendo una misma Esencia, en
cambio es diferente; teniendo la misma Naturaleza, no tiene sus características.
O lo que es lo mismo, las dos mitades
de la Existencia, están separadas y son irreconciliables.
Dios castiga a su Creación. Su
Creación no cumple con la función para la que ha sido creada. La Creación, hace
su voluntad, desobedece y hace lo contrario de lo que está en su Naturaleza y
además llama a su otra mitad, con cualquier nombre, pero por teléfono porque no
la quiere ver.
Somos una mitad, que en su
engreimiento se cree completa y se sumerge en el sufrimiento, añorando su otra
mitad.
Me pregunto si el Universo es Uno, si
Dios es Uno, si la Naturaleza de SER es Una, si el Amor transmuta en Uno
cualquier número de individualidades: “Cómo es posible que cualquier cosa que
veamos o percibamos no sea esa mitad añorada”.
Porque según las matemáticas, en Uno sólo puede haber dos mitades. Y esas mitades no pueden separarse sin dejar de
ser Uno.
Si yo soy la mitad de lo demás, si
puedo vivir manifestándome es porque soy la mitad de la Vida, que no pudiendo
existir, vivir o manifestarse, lo hace en mí. Si mi Eternidad depende de mi
otra mitad, que en este caso es la mujer, y en la mujer el hombre, porque
nuestros nuevos cuerpos los tenemos que crear y dar vida entre ambos, como
mitades del Creador, de lo temporal que se hace Eterno, es de imbéciles,
ignorar, castigar o hacer sufrir a nuestra mitad, simplemente porque nos
identificamos, con la mitad que se siente incompleta y busca constante y
eternamente su otra mitad, creando su propio sufrimiento por su actitud y sus
hechos, al crear el sufrimiento en su mitad, obviamente no podemos evadirnos de
ese sufrimiento.
Me pregunto a veces, si los seres
humanos somos gilipollas o simplemente ignoramos lo que significa Humanidad. Si
pensamos que la Humanidad es la mitad con la que nos identificamos, obviamente
es que somos gilipollas. La única utilidad de que exista un Creador, es que
exista una Creación, si quitamos una mitad, la otra desaparece.
Ignorar o rechazar la existencia de
Dios, que simplemente es Todo, la suma de todas las individualidades, nos lleva
a la inexistencia de las partes, lo que nos lleva al gilipollísmo de creer que
somos una "Matrix" de inexistencia real. O una Irrealidad existente.
Obviamente nos hemos quedado en que
somos una mitad, que no tiene otra mitad, lo que hace imposible encontrar lo
que somos como individualidad, como uno, permaneciendo eternamente como mitad
de algo.
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