Creemos, que los abusos, violaciones,
asesinatos y pérdida de la humanidad con sus principios y valores, que hemos
padecido desde cualquier poder, que sólo obedece las leyes que les favorecen y
cuando no, establecen unas nuevas, es lo natural: El pueblo obedece y el Poder
establece la Ley.
Desgraciadamente, con la pérdida de la
capacidad de pensar del pueblo, quienes ascienden desde el pueblo al poder, lo ejercen
desde el abuso y la violación de la Justicia, independientemente de que obedezcan
lo que han escrito para que el pueblo lo obedezca.
Obviamente, la Injusticia rodea
nuestra convivencia, las Leyes sólo están para proteger el poder y silenciar al
pueblo. Hemos olvidado el significado de Justicia y el Concepto que la define.
La Justicia no necesita de leyes, sólo
es necesaria la Dignidad, para que la convivencia se establezca dentro de la justicia.
La Dignidad proviene del Amor, el Amor
es entrega y respeto. Algo que al renunciar a nuestra responsabilidad, hemos
desechado de nuestras vidas.
“Amar al prójimo, como nos amamos a
nosotros mismos”, exige que nos entreguemos y respetemos lo que somos, para
entregarnos y respetar al resto del Universo.
Ser y respetar lo que somos, significa,
que como obreros debemos realizar nuestra función lo mejor posible, con entrega
total a lo que hacemos. Que desde el amor, hace que no miremos lo que recibimos
en el intercambio, pues el amor como entrega, se entiende como lo que se da y
no lo que se recibe, que pertenece a la capacidad de amar de los demás.
Político, significa servidor del
pueblo, el gobierno tiene la función de servir al pueblo, buscando lo mejor
para todos los ciudadanos. La protección de sus derechos, de la convivencia en
paz con el resto de países, el respeto por el pueblo sin importar su
nacionalidad y la entrega en su función de servicio, de encontrar una
convivencia feliz y en paz.
El empresario, está al servicio del
pueblo igualmente, debe encontrar la forma de producir cuanto es necesario, a
un precio justo y pagando unos salarios en función de los beneficios generados
por los trabajadores. No es la responsabilidad exclusiva del empresario, sino
también de los trabajadores, encontrar el equilibrio entre precios, salarios y
beneficios.
Cuando cada individuo cumple y respeta
su función, la Justicia se establece por Sí misma y mediante el diálogo. Es algo,
que no evita que siendo cada persona diferente con todas las demás, sea
necesario establecer mediadores o jueces que determinen qué opinión es la más
justa.
Pero la Justicia, impuesta por la Ley
y la fuerza, es sólo necesaria por el borreguismo nuestro, de seguir al pastor,
renunciando a nuestra libertad y capacidad de pensar. Algo que conlleva la
pérdida de autoestima y nos lleva al abuso de los débiles o a vender nuestras
almas a los fuertes, poderosos, abusadores o violadores de la indefensión o
debilidad.
La Justicia es fruto del Amor, que
sólo necesita entrega y respeto, por nosotros y por los demás. Siendo cada circunstancia
y momento diferentes, es imposible escribir lo que es justo en cada caso.
Por eso es el respeto propio, el cumplimiento
de nuestra función desde la entrega y la aceptación de nuestra responsabilidad
y libertad como seres humanos, el camino más corto para encontrar la Justicia
en la convivencia y manifestación de nuestro vivir.