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Yui Shin

martes, 20 de enero de 2015

ZEN O RELIGIÓN

          El budismo no entra en la categoría de religión para algunos, tiene connotaciones filosóficas y religiosas para otros, es solamente una filosofía de vida, dicen muchos.
          Es algo, en lo que el propio budismo no suele entrar, se conforma con ser budismo. Las definiciones depende de cómo es percibido o la capacidad y forma de aprendizaje de cada uno, para el budismo le basta con ser, el intento de transmitir la enseñanza del Buda.
          En general llamamos religión, a un compendio de ritos, enseñanzas y creencias, en las cuales, en las religiones actuales al menos, básicamente y de una manera simplista hay: “Un dios, el cual durante un periodo más o menos largo ha creado un universo. En su naturaleza de absoluto, eterno, origen y principio de todo, en la actualidad se dedica a premiar o castigar, a su creación; comprobar que todo funciona según sus normas y directrices; él es el único que hace y deshace realmente y la única posibilidad de que nosotros podamos mejorar en nuestra condición es, que él lo haga o permita, por haber cumplido nosotros con sus requisitos. Aparte de eso si cumplimos con todas sus demandas, en caso de que nos surja un enemigo el nos ayudará a destruirlo”.
           No me extraña que le cueste tanto venir a vernos, de todas formas, con esta definición que tenemos de él, difícilmente le reconoceríamos aunque se sentase a nuestro lado. No solamente hemos escrito las reglas por la que se rigen las religiones, hemos hecho la caricatura de todos nuestros dioses, les hemos dado sus poderes y solamente le hemos nombrado un paje o profeta, que es el único autorizado a hablar de él.
          El Budismo no tiene un dios concreto, solamente al Buda Eterno y Absoluto. Él no crea, ni se explica en budismo cómo ha creado el Universo, simplemente dice que es el Cuerpo de Buda. Luego tenemos a varios Budas del pasado: Bibashi, Shiki, Bishafu, Kuruson, Kunagonmuni, Kasho, representando a la miríada de Budas que ha habido, tenemos al Buda del presente, al Buda de nuestro Universo, Shakamuni, tenemos al Buda del futuro Maytrella. ¿Son todos los Budas?, no, son tan numerosos como los granos de arena del Ganges, los hay de innumerables Universos, conviviendo con el nuestro. Lo único que tienen en común es la Enseñanza, la Doctrina que han transmitido, todos Ellos transmiten la misma enseñanza: “La de la Impermanencia, la del Sufrimiento, la del Camino Óctuple, la de la ausencia de Ego”. Solamente dice que el Buda está formado y se expresa en: “Los Tres Tesoros, Buda, Dharma y Sangha. Todo aquello que convive dentro de un mismo cuerpo, es Buda.
          Lo que conforma la filosofía, explicando no solamente una filosofía, sino: sicología, evolución de pautas mentales, desarrollo de las formas, transformación y evolución de los sentimientos y muchas cosas del funcionamiento de la vida en la dualidad, está recogido en el “Tripitaka o Canon Pali”.
          Pero quizás, donde se recoge mejor el Espíritu del Budismo sea en el Zen. Esta es al menos mi opinión.
          Podemos decir que el Zen, no es una religión, que no es en muchos aspectos, ni tan siquiera  algo que podamos llamar una filosofía, al menos como se entiende en general, que es muchas palabras que dirigen o explican un comportamiento.
          Yo definiría al Zen como: “Aceptación de Libertad Responsable o la Libertad que nace de la Aceptación de la Responsabilidad”.
          No se caracteriza el Zen, en la creación de conceptos rígidos o reglas fijas para la convivencia. La forma de transmitirse es a base de rigidez en las formas, esfuerzo por llegar a la meta, entrega absoluta de cuanto eres. Su objetivo, que no quede nada que no seas, que para alcanzar la flexibilidad, el fluir de la Vida, habrás renunciado a todo, para que solamente quede: “La aceptación de tu Vacío”, el aceptar ser la manifestación de la Vida en el cuerpo, expresar la manifestación de las enseñanzas en vivir y pensar, para ser Buda, el Buda del Presente Eterno.
          A veces hay dificultades para expresar ideas, conceptos. Apenas hace un día o dos, el Papa, cabeza y faro del catolicismo, decía “Algunos piensa que ser un buen católico es ser como los conejos”. Lo probable es que en los próximos días, se hable de: que permite el preservativo, que no es contrario al aborto y que la iglesia se hace más flexible. Olvidando el contexto de la responsabilidad.
          Podemos hacerlo en promiscuidad, con fidelidad, una vez al mes, tomando anticonceptivos o abortando. El Zen no nos dice nada sobre ello, simplemente nos habla de responsabilidad, como el Papa, como cualquier persona con sentido común. La química de los anticonceptivos, puede crear monstruos cuando queramos tenerlos, o puede que no, podemos abortar, por nuestra irresponsabilidad y no poder tener hijos cuando queramos.

          Ser responsables del mundo que hemos creado, de nuestra vida que hemos creado, de la sociedad que hemos creado, de las relaciones que hemos creado, se llama Filosofía Zen, que simplemente es: Responsabilidad de lo que somos, hacemos y omitimos, por eso el Zen es Libertad, porque solamente puede nacer de la Responsabilidad. Somos la expresión de la Vida que hemos Creado.


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