El sol
está asomando tímidamente, hace frío, y ello me hace preguntarle con una
sonrisa: ¿Quién eres tú, para decidir que faltan unos días, para que un año
termine y otro comience en mi vida?.
Confío en
no haber sido duro con mi pregunta, que impida que el sol pierda su timidez,
impidiendo que lleguen la primavera y el verano. Que un eterno invierno cubra
mi vida, simplemente por desear saber cuando comienza y termina el ahora de mi
existencia.
¿Quién
puede decidir, cuándo comienzo a vivir o deambulo sin hacerlo?, si trato de
vivir: ¿En qué momento puedo hacerlo?, si no aprendo a vivir: ¿Cuándo puedo
comenzar a ejercerlo?
¡Dichoso ahora!, en los dos sentidos en lo engorroso y sumergido en
felicidad.
Vivir o no
saber hacerlo, lo podemos ejercer solamente en cada ahora. Es ahora cuando
comenzamos a vivir. Es ahora cuando no sabemos hacerlo.
Cada día,
cada semana, cada año, cada existencia comienza cuando termina, ahora.
Podemos
esperar todo un año, para iniciar una nueva vida, para dejar de no saber vivir,
para comenzar a amarnos. Pero para aquellos que verdaderamente quieren hacerlo,
ese comienzo es cada ahora de todo el año, cada ahora de una existencia, porque
no hay que cargar con lo que hemos terminado ahora, sino crear ahora la vida que
hemos soñado, un invierno donde cada momento que pasa nace más la primavera, el
verano, el otoño, que nos dejaran cansados, exhaustos de florecer y fructificar
nuestras vidas.
Pero incluso
el invierno que nos trae, la primavera, el otoño y el verano, nos traerá un nuevo
invierno donde descansar, para vivir lo que nos trae.
No es el sol,
alguien o algo, lo que nos trae un nuevo comienzo o el terminar de lo que no deseamos,
es nuestro renacer en cada ahora el que permite vivir en la época deseada, porque
somos sus creadores.
Todo es nuevo
para el creador, todo es viejo para el que espera que la Vida o Dios se lo dé.
Maestro.... Un abrazo.... 🦋
ResponderEliminarQuien busca no puede encontrarse,...
Pero no le busco, pero tampoco le veo....
Pero sí le siento... Como el viento.... 🦋