CONVERSANDO

          Escribía el otro día acerca de las entrevistas con mi Maestro, cómo me habían golpeado en varias entrevistas, incluso hasta sangrar por la cabeza. De que en mi respuesta a la pregunta había considerado que: “Lo veía o creía innecesario”.

          Es difícil de explicar, una conversación en la que alguien te muestra la Vida, esa que eres, no la de nadie más, no de la que estamos viviendo, sino la que estamos viviendo y la que somos al mismo tiempo, quitando todo cuanto no está incluido en Ella.

          Hace unos 9 años que compré la parcela donde vivo, el constructor me dejó casi sin dinero, entrando la lluvia y la nieve dentro, sin electricidad, sin que funcionase bien el agua o el gas, la casa inundada por debajo levantó el suelo de madera, escombros alrededor, mes de noviembre, único habitante en el pueblo, sin conocer la zona, y un aislamiento del frío que tenía que meterme bajo la manta, acostarme al oscurecer, levantarme cuando tenía hambre, fue pasando el invierno. Un día vino alguien de un pueblo vecino a caballo, me encontró con un recogedor de mano, haciendo un camino en la nieve para tirar la basura en los contenedores.

          Me dio el número de teléfono de los autobuses de la Demanda y me llevó en coche cuando tuve que hacer algo fuera del pueblo, pues hay que comprar a unos 13 Km.

          Con el dinero que me quedaba, me hicieron algunos arreglos gordos, el resto lo he tenido que hacer yo, comprando los materiales.

          Un día recibí la carta de un abogado instándome a cerrar una puerta en el muro, los planos indicaban que era un camino. Así que comencé a buscar explicaciones en la Administración Pública, de un departamento a otro. Sin respuestas, con mentiras o medias verdades, que con el tiempo me llevaron a que no solamente el constructor, la propia Administración y los vecinos había expoliado y robado en la propiedad, reduciendo una superficie catastrada de 1268 metros cuadrados, a 647m2, que un vecino redujo a 602, que las irregularidades de la Administración, con las ilegalidades y dejación de funciones del Ayuntamiento, dejaron reducida a 500 metros cuadrados. El derrumbamiento de las edificaciones en unos 7 años, reduciendo la propiedad a solar.

          Esos metros de parcela robados, se entregaron a dos vecinos. El juicio del que he escrito fue por un patio de luces necesario para la entrada de la luz en la vivienda y el desagüe de los tejados en la propiedad, sin echarlos en terreno ajeno.

          El resultado, la Injusticia, la Indignidad y el abuso de poder. En una argumentación no importa quién tiene razón, no es importante si dices la verdad, incluso si está equivocada o hay equivocaciones en ella. Los Jueces dictan y sentencian una Injusticia, una Indignidad, y es todo, es la ley o el retorcimiento de ellas, es el uso de la ley para cometer una Injusticia, que no puedes recurrir, si no es con poder o dinero.

          Fue la explicación de mi Maestro a cuál es la Naturaleza de Buda, a por qué no se caen las estrellas, por qué las parejas o las mitades tienen dos partes. No es la pregunta sino qué entiendes en la respuesta, lo que dirigirá la vida de quien recibe la respuesta y pregunta del Maestro.

          “Lo veo o creo innecesario”. Fue la respuesta en cada gota de mi sangre, porque no es la vida de los demás lo que es importante en la mía. Estamos rodeados de quien piensa que tener el poder o la fuerza es quien puede vivir.

          Pero la fuerza y el poder residen o deben residir en la Dignidad, que nos lleva a la Justicia, la Justicia que nos lleva al Amor.

          Es el que el vecino robase lo que no necesitaba fuera de su ambición, el que los demás lo permitiesen y amparasen con su silencio, es que un Ayuntamiento permitiese la invasión de terreno público que pertenecía a todos, es que la parcela probablemente pagó a Hacienda por 1268 metros cuadrados y tendría unos 1000, hay tanta mierda, Indignidad, Injusticia, ambición, falta de humanidad.

          Eso es la respuesta que recibes, eres Buda, pero no por herencia, sino porque en cada ahora de tu vida, tienes que permanecer siéndolo, sin que pueda aceptarse otra cosa en ella.

          Vivir con dignidad, usándola y respetándola, no es algo vuestro, porque mi vida es solamente mía. Es “Ahora” cuando debo de vivir con Dignidad, porque un día seré alcalde, juez, concejal, secretario o funcionario. Siempre soy vecino, el vivir con Dignidad, hace innecesario los Juicios, la violencia, el tener que vivir con miedo.

          Esa ha sido mi respuesta a lo largo del vivir: “Hay preguntas o respuestas que no son necesarias”, aunque sean hechas continuamente.

          La Vida es lo que Es, porque la hemos creado así. No hay preguntas ni respuestas. No hay: “¿Por qué? o porque”.