No pretendo molestaros

Al parecer, algunas personas se sienten ofendidas porque no las agrego a mi foro. No tengo, ni pertenezco a ninguno, simplemente escribo y lo publico en abierto, para que libremente pueda ser leído o comentado por las personas que lo deseen. Suelo comentar las páginas que me lo permiten y les parezca bien, de las personas que me añaden a su foro. Suele ser lo que siento al ver lo que han publicado, intentando dar una visión diferente, desde la que ha sido escrito. Lo que os agradezco.

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Yui Shin

lunes, 27 de agosto de 2018

LA META IMPOSIBLE

          No solamente cuando lo escribo en el blog, cada vez que lo he dicho, sin importar a quién o dónde, la respuesta ha sido: “Eso es imposible”.
          A mí me ha quedado claro, es algo que nunca conseguiremos, es: “Imposible.”.
          Pero lo que me cuestiono, no es que no consigamos lo que al ser considerado imposible ni tan siquiera intentemos. Mi incredulidad es que no nos cansemos de pedir leyes, que consigan erradicar: “Los abusos, los malos tratos, las discriminaciones, el terrorismo de todo tipo, la delincuencia, la drogadicción, la irresponsabilidad, la violencia entre personas y contra la Tierra y sus formas de vida, las corrupciones, y tantas cosas como vemos que hacen que los demás no tengan humanidad”.
          No puedo comprender, que sabiendo que, si tenemos dignidad personal cada yo en lugar de cada ellos, todas estas acciones solamente se realizarían en momentos de confusión o equivocados. Nuestra opinión sea, que no podemos tener dignidad, porque los demás tampoco la tendrán.
          Que sea este razonamiento el que me digan, para necesitar leyes que nos obliguen a los demás de alguien a tener dignidad, cuando menos me sorprende.
          Para mí lo que sería una meta imposible sería que todos los demás tuviesen dignidad, pero tenerla yo me parece que no hay ni que cuestionarlo, soy un ser humano, cómo podría serlo si no tengo dignidad.
          Dignidad, es defender y luchar por la Verdad y la Justicia. No quiere decir que tenga que haber una Verdad y una Justicia, sino que la Dignidad nos impida mentir o tratar de obtener unos resultados que nos beneficien, mintiendo para ser beneficiados por lo que sería Injusticia, al premiar la Mentira por encima de la Verdad.
          Quizás lo más cercano al concepto que usamos de Dignidad sea la: “Prepotencia y orgullo”, siendo que la Dignidad como Concepto de la que hablo sea lo opuesto a ello.
          Siendo la Ley justa, si no hay Dignidad no podría ser llamada Justicia. Justicia es cuando se realiza la acción para que prevalezca la Verdad, no que salga algo correcto porque se han dado las circunstancias.
          No comprendo que todos estemos pidiendo Justicia: hombres y mujeres, homosexuales y heterosexuales, políticos y pueblo, los de una ideología o religión y los de las demás, todos añoramos, pedimos, exigimos: Justicia, Paz, Humanidad, Respeto y todo lo que soñamos tener en nuestras vidas, en nuestra sociedad.
          Pero lo buscamos, pensando que alguien tendrá que obligarnos para conseguirlo, que además depende de los demás y no de nosotros.
          ¿Tan difícil es pensar que podemos tener y usar la Dignidad?
          Porque es todo lo que es necesario para tenerlo, saber lo que es la Dignidad en primer lugar, después hay que darle vida y espacio en las nuestras, en la mía, que es en la única que la puedo crear.



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