MIRANDO A LOS OJOS DE LA VERDAD

          La Mentira, es la Verdad del Mentiroso. No es en el Concepto donde se separan los opuestos, al no existir en Él. Es en la percepción separada de los opuestos que realiza quien sale fuera de la Verdad.

          Lo que nos impide mirar directamente a los ojos de la Verdad, no es su dificultad o que algo lo impida. Los ojos que podemos mirar, están velados por ese Velo de Isis que imposibilita ver el rostro de la Diosa, de la Verdad, de la Perfección, tejido por nuestra discriminación, que compara la separación de lo que no puede separase.

          La Verdad carece de rostro y de ojos, por lo que no pueden mirarse.

          La Verdad existe, como Naturaleza de lo que algo y Todo Es. No pudiendo existir algo, que mire a la Verdad Absoluta, que pueda percibirla, sentirla o ser percibido como siendo Naturaleza de la Verdad.

          Tratamos de encontrar la Verdad, que oculta, que manifiesta o que impida la Falsedad y la Mentira. Pero es algo imposible para Ella, el ser mostrada como opuesto de aquello a lo que le da Naturaleza de Verdadera Falsedad o Verdadera Mentira.

          Es algo que no puede hacer la Verdad, sin su propia desaparición. Pues su existencia como Verdad, depende de la existencia e inclusión de Ellas en su propia Naturaleza, que solamente quien mira desde la separación de los opuestos de la Dualidad, puede llamar Naturaleza y Verdad.

          El ser nombrada y percibida como Naturaleza, solamente es posible si quien la observa le da Entidad, que es el Velo, que impidiendo que se miren sus ojos inexistentes, pueda creerse que los hemos percibido o visto.

          Creemos que podemos expresar la mentira y la falsedad, pero no podemos hacerlo desde el Concepto de ser una Verdadera Mentira, o Falsedad como Verdad de un mentiroso o falso.

          Por lo que aquello que no es Verdad, solamente es debido a nuestra percepción, que tratando de encontrar la Verdad existimos sumergidos en la Falsedad y la Mentira, único lugar desde donde puede ser percibida, no como Concepto o Naturaleza, pero sí como polaridades separadas de la Dualidad.

          Cualquier cosa mirada desde el prisma del Concepto o Naturaleza, no puede ser percibida, porque es la propia Esencia de lo que se está siendo, en un Ahora que siendo Eterno solamente puede contemplar un solo Ahora en la Eternidad.

          La Verdad no es diferente a la Perfección, pues ambas manifiestan la Naturaleza de lo que se manifiesta o está manifestando en el Ahora.

          Para convivir en la Verdad, es necesario saber, desde dónde se contempla y manifiesta esa dualidad de la Verdad, cuando sus polaridades son percibidas en la separación.

          Cuando deseamos manifestar la Verdad o contemplar la Perfección desde su Naturaleza no Dual, es siendo Amor, desde donde esa Dualidad es posible percibirla como Absoluta.

          El Amor nos impide tener entidad propia y separada, por lo que la Aceptación de cualquier Naturaleza de la Existencia, es percibida como Vacío, al aceptarla como lo que estamos siendo.