Se sentó la Ignorancia, la oscuridad
en las faldas de Mara, y desaparecieron para que nacieran: La Iluminación, la
Sabiduría y Buda.
Sólo Shakyamuni, supo que quien se
levantó, fue el Shakyamuni Eterno que siempre había sido.
Nos sentamos en Silencio, los ojos
entrecerrados, acudiendo al interior, siendo el observador de lo externo y de
lo interno.
Creemos que al igual que Shakyamuni se
levantó: Iluminado, Sabio y Buda, nosotros nos levantaremos siendo algo que no
éramos, algo nuevo que hemos soñado y nos hemos esforzado por conseguir.
Quizás los demás tendrán que decirnos
lo cambiados que estamos, para darnos cuenta de que somos lo que somos, algo
que no podemos cambiar.
Y es que lo único que encontró
Shakyamuni y nos dijo es que Somos Buda desde antes del principio, que lo somos
eternamente, que no podemos cambiar lo que somos,
Que sólo cambia lo que percibimos: En
la noche vemos estrellas, en el día el Sol. En invierno sentimos frío, en
verano calor, y es que todo es impermanente, pero lo que Es, permanece siendo
eternamente.
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