Leía el otro día, acerca de la
superficie y riquezas de África, publicado por Maite: - África tiene el 60% de
la tierra cultivable; África tiene el 90% de la reserva de materias primas; África
tiene el 40% de la reserva mundial de oro; África, 33% de la reserva de
diamantes; África tiene el 80% de la reserva global de Coltan (mineral para la
producción de teléfonos y electrónica), principalmente en la República
Democrática del Congo; etc.
Si miramos que es la cuna donde nace
el hombre, las grandes culturas que la habitaron y su historia, cuesta entender,
qué razones hay para que sus habitantes huyan arriesgando sus vidas, para poder
comer y vivir.
La herencia de civilizaciones
conquistando y esclavizando otras, la tribalidad, que lleva a que pequeños
grupos dominen o controlen, a otros, las guerras que llevaron a que unas tribus
llevaran a vecinos de otras, para ser vendidos como esclavos. No muy diferente
a Europa en algunos aspectos, pero sí en sus resultados. Al final Europa
conquistó África, conquistó América, Australia y prácticamente el mundo
conocido, cuando la esclavitud y la existencia de personas sin alma era normal,
al no ser europeas.
La dominación y exterminio de
civilizaciones, permitió que una decadente Europa, recobrase la riqueza y el
orgullo de tener poder. Las colonias y territorios conquistados, proveían de
cuanto carecía Europa, destrozada por guerras, envidias y odios y una
explotación sin control.
Es la sociedad heredera de esos
tiempos, en la que vivimos actualmente. Obviamente, hay herederos que dilapidan
o continúan los negocios y bienestar heredado y otros que gastan sus herencias
para mejorar la tierra en la que viven y la vida de sus ciudadanos.
En una gran máquina, es suficiente con
que no funcione una pieza, una individualidad, para que la máquina sea un montón
de hierro. Es suficiente con que una célula no cumpla con su función y enferme,
para que colapse un organismo enfermo. Es suficiente que haya un árbol enfermo,
para que desaparezca un bosque. Una sola manzana podrida puede destruir la cosecha
entera.
Eso es nuestra sociedad: Un solo país,
un solo pueblo, una sola persona, puede destruir y esclavizar nuestra sociedad,
nuestra raza, nuestra humanidad. Sólo un pequeño animal, débil e indefenso,
podría destruir la Tierra.
África, América, Europa, Asia u
Oceanía, es suficiente con una dictadura corrupta, una sociedad enferma, para
que la convivencia y hermandad de todos, sea destruida.
Abogamos por: el respeto, la
erradicación de la pobreza y el hambre, la sanación de las aguas, bosques,
terrenos, y aíre de nuestro hogar, queremos gobiernos honrados, vecinos
empáticos y que nos ayuden, la desaparición de las envidias, los rencores y las
guerras.
Olvidando que es suficiente separarnos
por el idioma, por el pasado, por recuerdos de otros tiempos, el deseo de poder
de alguien, para que alguien desee conquistarnos.
Indios, aborígenes y culturas, que
desaparecen, porque no pudieron encontrar algo que uniese, en lugar de separar.
Ninguna individualidad está formada por individualidades separadas, sino
independientes que viven para mantener unida y sana, la Individualidad de la
que forman parte.
La Humanidad, erradicaría el hambre,
la pobreza, las guerras, las envidias y las fronteras, conservando la
individualidad y sobre todo la Libertad.