Nosotros creemos que para ir de un
lugar a otro, es necesario usar los caminos establecidos, las reglas de
movernos y que si no cumplimos con todas las reglas y leyes, no podremos
alcanzar la meta soñada.
El Universo sólo tiene una regla, no
importa el camino que creemos, las leyes que queramos establecer, o cómo nos
movamos, es imposible salir o movernos de Aquí. Nosotros establecemos los
caminos que nos llevan de un punto a otro, para crearlos destruimos cuanto hay
en el espacio que queremos ocupar con el camino. Pero al final, no podemos
romper la Naturaleza de Libertad, podemos ir de Aranjuez a Madrid, pasando por
cualquier punto de la Tierra o del Universo. Sin embargo cuando estamos en
Aranjuez, estaremos Aquí, al llegar a Madrid seguiremos estando Aquí, y a lo
largo del camino, si pasamos por otra constelación o por Alaska, en ningún
momento dejaremos de estar Aquí y Ahora.
Pero no sólo, hemos creado caminos por
donde debemos movernos, sino que son caminos creados por otros, que nosotros
debemos seguir o sufrir castigos o amenazas. Nuestra renuncia a la Dignidad y
Unidad, nuestra huida de la responsabilidad individual, nos obliga a caminar y
existir en los caminos que otros han trazado y creado, sin saber dónde nos
llevan, pues quien llega al final o está en un punto de un camino ajeno, somos
nosotros, cuya meta no es la de quien creó el camino.
Nuestro concepto de que hay que
destruir lo que ocupa un espacio, cuando queremos construir algo, nos hace
ignorar que no existen caminos, ni algo fuera del Uno o el Vacío en el
Universo, que ha funcionado durante miles de millones de años. Lo que hace que
hayamos dedicado nuestras vidas a destruir: Bosques, montañas, tribus,
civilizaciones, religiones, o cuanto se interponía en la creación de lo que deseábamos
construir.
Nuestras matemáticas, necesitan de
muchas y diferentes operaciones para alcanzar un resultado, que oscila entre
las tendencias a cero y a Infinito. Mientras el Universo sólo conoce el
resultado de un Uno Absoluto, llenando el Vacío.
Cuando una célula se divide, nunca
crea dos mitades sino dos UNOS. Cuando se juntan dos átomos o células, no se
crea una pareja o docena de algo, sino una nueva célula o átomo. Cuando se unen
un átomo de oxigeno con dos de hidrogeno, se transforman en UNA molécula de
agua, en la que cada individualidad es conservada, siendo sólo molécula de
agua.
El que si hay un millón de estrellas
sólo sea una Galaxia, y millones de Galaxias sean un Universo, y que millones
de Universos, no tengan otra salida que ser UN UNIVERSO, nos dice que la
Libertad individual del Universo, no se refiere a individualidades separadas,
sino que es la Libertad individual, que se conserva siendo UNO.
Buscamos un camino, que si vemos es un
camino ajeno, que seguimos renunciando a nuestra Libertad, vendiendo nuestra
alma, a quien es propietario o creador del camino. Es tan simple, que no haya
meta o camino que lleve a ella cuando se tiene por Naturaleza la Libertad, que
es difícil entender que como dice el poeta: El único camino que se crea al
andar, es la huella bajo nuestros pies, que no podemos ver, y siendo libres, el
siguiente paso, el siguiente ahora, la meta en la que estamos, es el Aquí y
Ahora que hemos creado.
La meta siempre es el Universo, la
sociedad, la familia o la individualidad que somos: Un@, Un@, Un@, …………