Hemos
vivido, la anulación de la Doctrina Parot, no entendiendo de leyes, podría ser
que fuese de arreglo a las leyes, pero no a la Justicia. Al tratar como humanos,
a gentuza más cercana a las alimañas que a las personas.
De
nuevo ha habido que indemnizar a asesinos, al ser tratados como con capacidad
de decir la verdad. Quien nunca ha sido capaz de pensar, de tener sentimientos
que recordasen o rememorasen principios de humanidad, indemnizado por ser
asesinos.